Así como celebridades de la política y el arte, personalidades del deporte en distintas partes del planeta no pudieron escapar al coronavirus y terminaron por infectarse.
El expresidente del Real Madrid, Lorenzo Sanz ,murió el 21 de marzo, tres días después de su hospitalización a causa de la enfermedad.
Varios jugadores de la Juventus de Turín dieron positivo, entre ellos el francés Blaise Matuidi y el delantero argentino Paulo Dybala, quien dijo el 27 de marzo sentirse “mucho mejor”.
El exdefensa del AC Milan, Paolo Maldini y su hijo Daniel, delantero del mismo club, fueron también infectados.
En Inglaterra el entrenador del Arsenal, el español Mikel Arteta, anunció su contagio el 12 de marzo y ya sanó.
El exguardián de la selección turca, Rüstü Reçber, fue hospitalizado el 28 de marzo, y también estuvo contaminado Fatih Terim, entrenador del Galatasaray.
Al menos una quincena de jugadores de la NBA contrajeron el coronavirus, entre ellos la estrella de Brooklyn, Kevin Durant.