En audiencia virtual usando el aplicativo Hangoust Meet, el juez José Solis Canchari del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de Amarilis, declaró fundado el requerimiento de prisión preventiva por nueve meses contra Jerry Jesús Molina Gómez (25), investigado por la presunta comisión del delito contra la libertad sexual en la modalidad de violación sexual en agravio de su sobrino de 11 años.
En la diligencia, el fiscal a cargo del caso expuso los fundados y graves elementos de convicción que vinculan al detenido con el delito. Informó que el abuso sexual habría ocurrido desde enero del 2016 a fines del 2018 en su casa ubicada en el distrito de Amarilis, pero que la familia del menor recién denunció el caso el 18 de mayo del 2020, casi cuatro años después.
Asimismo, presentó el examen de integridad sexual practicado al agraviado que a la fecha tiene 15 años y el cual confirma que si presenta lesiones contranatura antiguas. De probarse el delito, el trabajador del call center, podría ser sentenciado a la máxima pena de cadena perpetua.
DEFENSA. En comunicación telefónica con Tu diario, la defensa técnica del investigado indicó que el juez no valoró las contradicciones que existen en la presente investigación, razón por el cual sin fundamento y motivo declaró fundado el requerimiento de prisión preventiva solicitado por el Ministerio Público.
Informó que el magistrado no valoró la evaluación psicológica practicado al menor, quien ante un psicólogo habría dicho que desde los 8 años veía vídeos pornográficos junto a sus tres amiguitos, quienes en ocasiones se masturbaban. “Esta pericia es importante, porque queda en evidencia que el menor tenía una vida psicosexual activa a temprana edad”, indicó al informar su patrocinado habría estado trabajando en Lima desde diciembre del 2015 a finales del 2016, fechas que no coincidirían con la denuncia.
Asimismo, indicó que la denuncia sería una represalia debido que el menor y su mamá fueron sacados de la casa donde vivían porque no colaboraban para el alquiler. “Mi patrocinado niega haber tenido contacto sexual con su sobrino, dice que la denuncia es una represalia por haberlo castigado. Hasta el momento con lo conversado con mi patrocinado puedo asegurar que la investigación policial y fiscal es débil, voy a preparar la apelación para que los magistrados de la Sala evalúen el caso”, declaró el abogado.
Pese que la defensa y el mismo detenido niegan el abuso sexual contra el menor, el resultado del reconocimiento médico confirma la violación al agraviado. Aún queda un camino largo para que Molina Gómez pueda recorrer y probar su inocencia, tal como dijo en la audiencia de prisión preventiva.
