Por Jorge Chávez Hurtado
El vals es una de las formas musicales interpretadas en Huánuco, sin embargo, no tiene la raigambre, tradicionalidad y antigüedad que tiene la cachua, el chimayche, el harawi o la muliza. No obstante, es una forma musical que, junto al huayno y la muliza, tiene difusión y presencia en el repertorio musical huanuqueño. El extinto maestro Roel Tarazona Padilla, académico y etnomusicólogo, defendió categóricamente las características fundamentales del vals huanuqueño.
CARACTERÍSTICAS:
Dijimos que el vals huanuqueño, existe; no hay duda que sí. Pero, no tiene la fuerza ni difusión, ni singularidad del huayno. Intentamos, en una primera aproximación señalar algunos de sus rasgos:
a) El vals huanuqueño asume, como forma estructural, la forma musical característica del vals criollo costeño con el característico tres cuartos como compás.
b) Este vals, a diferencia del vals criollo costeño o limeño, cuenta en algunas ocasiones con fuga de huayno. En su estilo más tradicional, termina con el huayno obligado.
c) Algunos valses huanuqueños a diferencia del vals limeño, que es fundamentalmente heptafónico (uso de siete notas), usa la escala pentafónica (cinco notas básicas). Como en algunas regiones marcadamente andinas, donde se han dado valses conocidos, el fuerte influjo de la escala pentafónica, está presente en el vals huanuqueño. Como es obvio, el aire pentafónico, le da un carácter característico, plenamente andino.
d) El vals huanuqueño, está mayormente en modo menor. En este caso, usa el sistema heptafónico, pero con una preeminencia del modo menor en su forma antigua, es decir sin alteraciones ni cromatismos. Si bien puede haber valses con uso de escalas armónicas o melódicas, pero la mayoría de valses de las diversas etapas señaladas, presentan un sólido modo menor antiguo. En algunos valses, muy excepcionales, presenta los dos modos: la parte A, en menor, la parte B, en mayor, retornando a la parte A, en menor.
e) Las letras, incorporan los temas locales y regionales. Incluso los temas genéricos referidos a los sentimientos y al amor, en el vals huanuqueño, tienen un rasgo muy característico de lugar: hay cuidado por el carácter sensible y sentimental, y muchas veces respetuoso y formal. No hay la picardía ni el espíritu de fiesta, de muchos valses criollos conocidos o de los propios huaynos huanuqueños. Salvo, casos como el vals del Callao a Huánuco, o el Pillco Mozo, donde se escucha que con gracia y buen arte, se aluden situaciones coloquiales y vivenciales de interés.
f) En el desarrollo del ritmo, el dejo y la estructuración lingüística del hablar huanuqueño le da un giro y un sabor especial a los temas musicales.
PILLCO MOZO
(Vals)
Autor y compositor: Isaac Villanueva
Vuelan las golondrinas sobre el tejado de mi ciudad
mientras danzan las flores al son de un canto primaveral.
Banderas teñidas de rosas que simbolizan felicidad
flamean sobre el suspiro que salen dentro del corazón. (Bis)
Bordado de mariposas se ven los huertos de mi San Juan,
aroma de chirimoyas y guayabales en Quicacán.
Tu nombre es como un lucero que alumbra el cielo de mi nación
Huánuco pueblo mío de tradiciones sin parangón. (Bis)
Que lindas son mis paisanas cuando ellas lavan sus colorines
al borde del gran Huallaga o a las orillas del río higueras,
se muestran siempre orgullosas con sus faldones besando el suelo.
la gracia de su sonrisa es un encanto bajo su pelo. (Bis)
Yo soy un Pillco Mozo portero de mi tierra
y doy la bienvenida a todo aquel que llega.
Yo soy un Pillco Mozo amante de su tierra
y canto a sus mujeres bajo la luna llena. (Bis)
Chicha de jora, chicha de maní quiero un locro de gallina.
traigan guarapo también para mí y doy gracias a la vida.
Dame un campito en la banca quiero comer pachamanca,
0ye compadre shucuy, dóblame el plato de cuy.