Desde el 2017, la primera casa de música “Daniel Alomía Robles”, tiene la denominación de “Universidad Nacional de Música” (Ley: 30597), sin embargo, hasta el momento la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), no la reconoce como tal y figura como instituto con rango universitario.
Lo que manifiesta al respecto su director, Carlos Ortega y Obregón; es que todavía están en proceso de adecuación y subsanación de ciertos vacíos. “Nosotros no somos nueva universidad, no nos tendrían que llamar así, debido a que tenemos más de 60 años de trayectoria ininterrumpida en la enseñanza de música, lo que hemos indicado con claridad es que se tiene que dar un proceso de adecuación”, refirió.
Ortega informó que el miércoles pasado sostuvieron una reunión convocada por la directora del Conservatorio Nacional de Música de Lima, ene l que también estuvo el director de la Universidad de Música del Cuzco, y elaboraron un documento dirigido al ministro de Educación, para que tengan en cuenta esas particularidades.
Refirió que hay un proyecto de ley del congresista Javier Velásquez Quesquén, sobre los vacíos de este proceso de adecuación. “Nosotros como institución queremos ser universidad de música, pero también queremos que se respete los derechos de los trabajadores, porque ingresar al sistema universitario es un nuevo sistema, ¿qué pasaría con los docentes que tienen años de servicio?, y quién garantizaría la idoneidad académica en la especialidad de música si los profesores fuesen separados”, manifestó Ortega y Obregón.
El director resaltó que la Sunedu y el Minedu señalan que este proceso es una nueva implementación, cuando debería ser un proceso de adecuación, sin causar perjuicios.
Debido a estos problemas, Ortega, indicó que el proceso de admisión quedó en “standby” y están presentado un documento a la Sunedu, pidiendo que autorice el desarrollo del proceso, con el régimen que estaban trabajando, como instituto de músico con rango universitario, que dicho sea de paso, no perjudicará en nada a los alumnos regulares. La dificultad solo es con el proceso de admisión.
“No quiero ser pesimista, pero en el peor de los casos si hay cierta intransigencia o desidia por parte de las autoridades centrales podría posponerse hasta nuevo aviso el proceso de admisión”, agregó Ortega y Obregón.
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Con la autorización de la Sunedu, ‘Daniel Alompia
