El personero legal de la agrupación Renovación Universitaria Valdizana (RUV), Sebastián Campos Meza, presentó ayer un documento dirigido a la presidenta del Comité Electoral Universitario (CEU), Digna Manrique de Lara Suárez, solicitando nulidad del proceso electoral desarrollado el 2 de agosto en la Universidad Nacional Hermilio Valdizán, para elegir rector y vicerrectores del periodo 2021-2026.
En dichos comicios virtuales, resultó ganador para el cargo de rector el ex congresista Guillermo Bocángel Weydert, a quien lo acompañan Nancy Veramendi Villavicencios como vicerrectora académica y Víctor Cuadros Ojeda como vicerrector de investigación. Tras concluir el proceso electoral, dicha lista ganadora fue proclamando ese mismo día mediante la Resolución n° 061-2021-UNHEVAL- CEU, en el que detalló que sufragaron 335 docentes y 7709 alumnos.
En sus fundamentos, Campos Meza, señala que la elección fue convocada con Resolución n° 027-2021-Unheval del 5 de abril 2021, en la misma que fue establecido el cronograma electoral que debió regir durante todo el proceso, sin modificación como lo establece el principio de seguridad jurídica señalado por la Sunedu. En ese marco, el comité electoral debió adecuar su norma interna; sin embargo “vulneró dicho principio al modificar el cronograma en dos oportunidades: el 16 de abril y el 13 de mayo.
Otro argumento está referido al padrón electoral. Con Resolución n° 049-2021-Unheval-CEU del 16 de junio 2021, fue aprobado el padrón electoral, tras pasar por las etapas de observaciones y reclamos, lo que resulta inmodificable por el principio de preclusión, tal como establece el cronograma. La inclusión de uno o más votantes con fecha posterior es ilegal; sin embargo, el 26 de julio incorporaron a más electores.
“Dejamos constancia que en aplicación a este principio (de preclusión) no se permitió participar al Dr. Cayto Miraval Tarazona con candidato a la rectoría, y por la uniformidad de las decisiones deben aplicarse los mismos criterios”, señala Campos Meza en la solicitud.
Además, en la publicación del padrón electoral, consignaron el correo electrónico institucional de cada elector, haciendo vulnerable a suplantación; con el agravante que enviaron un comunicado para recuperar las claves mediante un algoritmo, de modo que cualquier persona pudo acceder al correo para emitir su voto. Igualmente, de los estudiantes incrementados en el registro, se publicó con el correo institucional y su clave el DNI, por lo que cualquiera pudo haber ingresado a votar.
El 2 de agosto, en pleno proceso electoral, encontraron un aula virtual de Posgrado, en la que estaban orientando la votación, hecho que fue de conocimiento de la presidenta del CEU, del presidente de mesa y representante de la Onpe.