
En los últimos días, la gestión del alcalde provincial de Dos de Mayo, Ramiro Pujay Hipolo, ha sido objeto de diversas críticas por la destrucción de un pino de la Plaza de Armas de La Unión. Este árbol era considerado una reliquia natural y muy querido por los lugareños.
Alex Cundera, un ciudadano muy conocido en La Unión, expresó su profundo dolor por este hecho. Para él, más que la pérdida de una vida vegetal, se trata de la desaparición de un elemento esencial para la comunidad. “Un árbol no solo proporciona sombra y oxígeno, sino que también representa la conexión con la naturaleza, el arraigo cultural y la responsabilidad hacia el medio ambiente”, dice.
Cundera enfatizó que un líder debe ser un ejemplo de cuidado y preservación, promoviendo el desarrollo sostenible sin comprometer el entorno natural.
Por su parte, el docente César Soto Alvarado, ex consejero regional por la provincia de Dos de Mayo, criticó la tala de árboles en la plaza histórica por parte de los funcionarios del alcalde Ramiro Pujay. Cuestionó el mensaje que se está transmitiendo a los ciudadanos, especialmente a las futuras generaciones. «Así pretende ser candidato regional de Huánuco. Si un árbol puede ser destruido sin consideración, ¿qué otros recursos o valores podrían ponerse en riesgo?», se preguntó.
Reflexionar sobre estos actos es una oportunidad para exigir acciones responsables y recordar que el verdadero progreso va de la mano con el respeto por el entorno. Como dijo una vez un sabio: «Quien siembra árboles, siembra esperanza para el futuro».