Cuando el coronavirus desbordaba en Huánuco, la gente pugnaba por oxígeno y los muertos superaron el número de la primera ola, ataúdes fueron lo que distribuyeron funcionarios del Gobierno Regional de Huánuco a un gran número de zonas a través de las municipalidades y parroquias; pero también a través de consejeros regionales.
“Buenas tardes estimad@s consejer@s, para informarles que la Dirección Regional de la Producción en convenio con el Inpe han confeccionado 200 ataúdes para apoyar a las familias pobres. Asimismo, informar que por disposición del señor Gobernador, los ataúdes serán puestos a disposición de los Consejeros Regionales para el reparto; en ese sentido deberán coordinar con el Ing. Lindey Alvarado Director Regional de DIREPRO, para la entrega”, fue el mensaje que recibieron los consejeros regionales en una fecha que no se pudo precisar, pero ocurrió en los primeros meses de este año.
Según afirmó el director de Producción, Lindey Alvarado Valdez, los consejeros participaron solo como veedores; sin embargo, el consejero Americio Cárdenas Quispe, dijo que la entrega fue directa y apuntó que uno de los que recibió fue su colega Johann Aguirre Caldas.
Según Cárdenas, los consejeros que recibieron los ataúdes por parte del gobierno regional para repartirlos, fueron los consejeros Jaime Oliveira, Elías Falcón y Johann Aguirre, quienes representan a las provincias que a la fecha no han sido beneficiadas con una planta generadora de oxígeno.
“Creo que todos han llevado; eso sí, creo que no recibieron los consejeros Juan Ferrer, yo e Iban Albornoz, él estaba en desacuerdo (…) No cuadraba, porque en ese tiempo la gente se moría por cantidades. Era un mal gesto entregar ataúdes cuándo la gente se estaba muriendo y necesitaba oxígeno“, dijo Américo Cárdenas, quien reveló que, a él le informó de la entrega de ataúdes su colega Johann Aguirre.
Consultado sobre el particular, Gaspar Rumi Benancio, también se pronunció y afirmó que él tuvo conocimiento de la disposición de entrega de ataúdes; razón por la cual, dijo que le informó al director de la Red de Salud de Dos de Mayo y al párroco de la ciudad de La Unión, quienes recibieron 20 ataúdes.
Cárdena y Rumi se preguntaron, por qué el gobierno regional firmó un convenio con el INPE para la fabricación de ataúdes, cuando por la pandemia el Estado cubría el costo de los ataúdes y el costo de nicho.
A diferencia de la versión de los consejeros que se pronunciaron, Lindey Alvarado, aseveró que ninguno de los consejeros recibió de manera directa. “Los consejeros han sido articuladores”, comentó, al sostener que fueron el nexo entre el gobierno regional y los representantes de los gobiernos locales y parroquias para ser beneficiados con los féretros.
Se conoció que, habrían formado una comisión especial en el Consejo Regional de Huánuco para ver el caso con el fin de imponer sanción disciplinaria a los consejeros que recibieron los ataúdes, pero, por decisión de la mayoría fue archivado el caso.