El Pleno del Congreso aprobó con 98 votos a favor, 10 en contra y 4 abstenciones presentar una demanda competencial y medida cautelar contra el Poder Ejecutivo ante el Tribunal Constitucional.
Esta demanda se da por el ejercicio de la cuestión de confianza, con la finalidad de que el TC precise si le corresponde al Gobierno interpretar la decisión del Parlamento, que fue considerada por el presidente Pedro Castillo como un “rehusamiento expreso de la confianza”.
En el debate previo, los congresistas de la oposición hicieron un llamado a todas las bancadas para apoyar esta iniciativa, aduciendo a una “defensa de la institucionalidad del Congreso”.
El congresista José Balcazar y Pasión Dávila cuestionaron que el Legislativo impulse una demanda competencial; mientras que María del Carmen Alva y Arturo Alegría explicaron que se debe defender la institucionalidad ante cualquier riesgo de cerrar el Congreso.
La Mesa Directiva decidió “rechazar de plano” la cuestión de confianza que planteó Aníbal Torres, expresidente del Consejo de Ministros, a fin de que se derogue la Ley 31399, ley que limita el referéndum. Tras la decisión, Aníbal Torres renunció a su cargo y ocasionó una crisis ministerial.
