El Departamento de Investigación Criminal investiga la denuncia realizada por la madre de una estudiante que salvó de ser violada por el chofer de un trimóvil blanco con celeste. El frustrado caso de violación contra la libertad sexual en la modalidad de violación sexual ocurrió cuando la universitaria de 17 años abordó el vehículo con la intensión de dirigirse a su casa, avanzaron dos cuadras y el chofer volteó la mirada para luego sacar un frasco de spray y rociar en el rostro de su pasajera.
La joven que no entendía lo que pasaba quedó inconsciente por unos minutos, pero reaccionó cuando subía por la Capilla de Puelles. Al increpar a donde la llevaba, el mototaxista continuó su recorrido por lo que la universitaria no tuvo otra opción que arrojarse desde el bajaj en marcha dejando su bolso con sus cuadernos y otras pertenencias. Otro taxista que pasaba por el lugar auxilió a la joven hasta su casa, donde contó lo ocurrido y junto a su familia acudió a la policía para denunciar el caso.
