Después de nueve años y cinco meses, el caso más sonado en Huánuco llegó a su fin con la absolución por falta de pruebas de Lucy Villanueva Mory, abuela de la escolar Lucero Ludy Atencia Calderón de 10 años de edad. A la audiencia pública, realizada ayer, asistieron la defensa técnica de la investigada, el fiscal superior Manuel Cornejo Falcón, pero no estuvo presente Nadia Calderón Villanueva, mamá de la menor desaparecida.
La Sala Mixta Permanente de la Corte Superior de Justicia Huánuco, integrada por los magistrados Ernesto Diestro León, Cecilia Garay Molina y Richar Ninaquispe Chávez, resolvieron por unanimidad absolver a Lucy Villanueva procesada por la presunta comisión del delito de secuestro en agravio de su propia nieta ocurrido el 25 de enero del 2010.
Al respecto, el fiscal que siguió el caso explicó que durante las investigaciones quedó descartado a base de pericias las acusaciones que estaban plasmadas en el informe policial y sobre la presunta participación de Lucy en el secuestro de su propia nieta, al no existir elementos que sustenten la acusación del Ministerio Público, los jueces no tuvieron otra opción que absolver a la principal sospechosa. Asimismo, indicó que la única prueba que existía en el expediente 210-2010 era la declaración del taxista Ricardo Máximo Augusto Rojas, quien pese a las notificaciones no acudió al juicio oral.
HECHOS. El 25 de enero del 2010, Lucero Nadia salió de su casa ubicada en el jirón San Martín 1340 con dirección a su colegio Hermilio Valdizán, donde estaba realizando su ciclo de nivelación, pero en el trayecto desapareció como arte de magia y hasta la fecha su paradero es un misterio.
Desde el inicio, Nadia Calderón Villanueva, acusó a su madre Lucy, de estar detrás de la desaparición de su hija. La sindicación esta, basada en la declaración del taxista Ricardo Máximo, quien dijo a la policía haber trasladado a la niña y su abuela desde el puente Calicanto hasta el poblado de Taruca, en Santa María del Valle, sin embargo, la acusada negó la sindicación aduciendo ser inocente, pero Nadia hasta ahora la acusa de haber secuestrado a la mayor de sus hijas por problemas de posesión y tenencia de bienes. En su momento, indicó que la disputa con su mamá inició por los procesos penales que tenía, por lo que Lucy, optó por secuestrar a su nieta con la finalidad de presionarla para que desista de las acciones civiles y penales.
Desde la que la menor fue reportada como desaparecida, la mamá hizo hasta lo imposible por ubicar viva y sana a la escolar, pero sin resultado alguno. Acudió a diversas organizaciones y programas, entre ellos Buscando Personas de David Nostas, donde Nadia al ser entrevistada declaró que su mamá y su padrastro eran los principales sospechosos que Lucerito no regrese a casa. Asimismo, recordó que Lucy Villanueva, estuvo detenida en el penal de Potracancha acusada de asesinar a su esposo Gonzalo Calderón dueño de la pollería “Fogón”, ocurrido en 1998 de cuyo proceso fue absuelta por dudas y no porque probó su inocencia.
También dijo, que su madre estuvo involucrada en el secuestro del dirigente de León de Huánuco, pero extrañamente uno de los testigos fue asesinado al igual que en el crimen de su padre, cuyos casos hasta la fecha no fue esclarecida. “En Huánuco hay mucha corrupción, pero hay un Dios que todo lo ve y él hará justicia”, dijo en su oportunidad la desesperada madre de familia al tiempo de indicar que su hija no era un animal para que puedan desaparecer fácilmente.
PENA. El 23 de agosto del 2011, la Segunda Fiscalía Superior Penal presentó su acusación solicitando 25 años de cárcel para Lucy Haydee Villanueva Mory como principal sospechosa de la desaparición de Lucero Ludy y como medio de prueba estaba la declaración del taxista, quien dio dos versiones a nivel policial y fiscal, pero jamás acudió al juzgado hecho que permitió que el caso no sea esclarecido hasta la fecha.
ALGO +
Mientras la principal sospechosa de la desaparición de la escolar fue absuelta por falta de pruebas, el paradero de Lucerito es un misterio para su mamá que no pierde la esperanza de volver abrazar a Lucerito.