
Herlinda Castro Ruíz, Agustín Cóndor Romero y Luis Manuel Cóndor Castro, fueron detenidos preliminarmente por 72 horas para ser investigados por el homicidio de César Lino Sandoval (36). El crimen del poblador ha causado conmoción en el caserío de Bellavista, distrito de Codo de Pozuzo, provincia de Puerto Inca.
La tarde del 4 de marzo, los familiares encontraron un costal negro y al abrir descubrieron que estaba una persona muerta (tronco, brazos y piernas), pero no ubicaron la cabeza, por lo que de inmediato dieron parte a la policía del sector y por tratarse de un hecho criminal, solicitaron la intervención de personal del Departamento de Investigación Criminal del Frente Policial de Puerto Inca y del Ministerio Público.
Luego de la diligencia de levantamiento del cuerpo, la fiscal Verónica Julca Castro dispuso el traslado de los restos a la morgue de Pucallpa para ser sometidos a necropsia.
PRISIÓN. Tras el hallazgo del cuerpo que fue reconocido por sus familiares, la fiscal a cargo del caso presentó ante el Juzgado Penal de Puerto Inca, la prisión preventiva por nueve meses contra Herlinda, su ex pareja Agustín y su hijo Luis Manuel, requerimiento que fue declarado infundado por el juez, debido que no había el resultado de la absorción atómica y dictó comparecencia con restricciones.
En comunicación telefónica con Tu diario, Benjamín Lino, dijo que él al igual que su familia están seguros que Herlinda, su hijo y expareja fueron los que mataron a su hermano. “Los vecinos nos llamaron informando que el 1 de febrero a las 5:00 de la mañana escucharon gritos, luego un disparo y unos minutos después un motocar salió con dirección al río Súngaro, y lo más seguro era para tratar de desaparecer el cuerpo de César”, dijo al tiempo de indicar que en el caserío de Bellavista es vox populi, que su hermano fue asesinado por su actual conviviente.
Asimismo, informó que César, Herlinda, Luis Manuel y Agustín habrían estado bebiendo cerveza, luego discutieron y acabaron con su vida utilizando una escopeta y con la finalidad de desaparecer el cuerpo, cortaron la cabeza, para luego meter a un costal y arrojarlo al río Súngaro.
Indicó que pese a estar desaparecido desde el 28 de febrero, Herlinda no acudió a la comisaría para denunciar, hecho que no sólo llamó la atención de su familia, vecinos, sino de la misma policía y la fiscal a cargo del caso, por lo que policías de criminalistica del Frente Policial Puerto Inca llegaron al inmueble para realizar pruebas de luminol a igual que el vehículo, donde habrían arrojado el costal negro conteniendo el cuerpo.