Cargando en brazos el féretro conteniendo el cuerpecito del bebé que perdió la vida durante el parto, indignados familiares y vecinos ayer en la tarde llegaron al frontis del Centro de Salud Potracancha, en el distrito de Pillco Marca para exigir justicia. Con cárteles en manos pedían la intervención de la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud) para investigar y sancionar a los responsables que, no sólo causaron la muerte del bebé, sino que dejaron en estado de coma a su madre.
“Exigimos justicia, no sólo por Edith Rivera Santamaría, quien están luchando por su vida en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Regional Hermilio Valdizán, pedimos a la policía y fiscalía que investiguen la muerte del bebé”, declaró para Tu Diario la hermana de Carlos Alberto Salazar Céspedes, esposo y padre de ambos agraviados. Asimismo, informó que por la irresponsabilidad de los trabajadores que la noche del 28 de noviembre estaban de guardia en emergencia obstétrica, dos niños de 8 y 5 años están sufriendo por lo que está pasando con su mamá.
Ante los gritos de justicia, dos médicos que estaban de turno en los servicios de emergencia salieron a la puerta para tratar de calmar a los manifestantes que exigían la presencia del médico Wilder Cruz Valdivia y la obstetra Jovita Orizano Falcón, quienes serían los que atendieron a la gestante Edith. “Como ser humano lamento este deceso, y puedo decir que están en todo su derecho de tomar acciones legales y si hay responsabilidad de parte del personal que ha atendido el parto, el Aclas va asumir, no nos negamos”, dijo un representante del centro de salud.
Otro representante del Aclas al dirigirse a los familiares que no cesaban en pedir justicia, dijo que al igual que ustedes, nosotros también estamos indignados, pero tienen que entender que aquí hay 120 trabajadores incluyendo estudiantes que no tiene nada que ver con la protesta. Informó que, que el Ministerio Público tiene conocimiento y está investigando para determinar si hubo o no negligencia con la muerte del bebé.
“Las personas que tienen la culpa, tienen que asumir su responsabilidad, pero por favor les quiero pedir que nos dejen trabajar porque aquí hay niños que deben ser atendidos. Nuestro compromiso es que la investigación sea clara y transparente para conocer la verdad”, dijo otro representante.
MUERTE. El deceso del tercer hijo de los esposos Salazar Rivera, ocurrió la noche del 28 de noviembre en la sala de partos del Centro de Salud Potracancha a donde la gestante fue llevada por su esposo, sin embargo, una resunta negligencia médica habría terminado en el desenlace. En el certificado de defunción firmado por el médico Wilder Cruz Valdivia, indica como causa de muerte del bebé ‘asfixia perinatal por circular doble de cordón umbilical ajustado, pero para evadir su responsabilidad penal, aclaró que ‘no atendió la expulsión’.
