
Ayer recordaron el 62° aniversario de incorporación de la mujer a la Policía Nacional. A nivel de la Región Policial Huánuco existen 352 policías, entre las cuales está la Suboficial Técnico de Tercera (ST3) Jennifer Roxana Delgado Gutiérrez, quien junto a otras siete agentes fue reconocida en ceremonia pública desarrollada en la División de Tránsito a donde asistió el director de la V Macroregión Policial Huánuco, Ucayali y San Martín, Gral. PNP Jorge Lam Almonte.
Delgado Gutiérrez natural de Lima tiene 19 años de servicio en la Policía, está casada con José Horruitiner Ramírez con quien tiene dos hijos. En entrevista con Tu diario, cuenta como distribuye su tiempo para cumplir su rol de policía, madre y mujer.
“Trabajo 24×24. En las mañana con mi esposo que es policía en retiro nos levantamos, ambos preparamos el desayuno, dejo listo a mis hijos para el colegio y me voy al trabajo, mientras que mi esposo los lleva al colegio, luego regresa a la casa y atiende a los animales que tenemos como son perros atropellados que recogimos de la calle, les prepara su comida, igual para nosotros y si tiene que lavar la ropa lo hace y en la noche me recoge”, cuenta la orgullosa esposa.
Asimismo recuerda que al inicio las cosas fueron difíciles porque su esposo estaba en el extranjero y ella trabajaba en Tránsito, donde formaban a las 6:15 de la mañana. “Vivía por Zárate y tenía que levantarme 3:30 y llevarla a mi hija hasta el Rimác para que la cuiden y de ahí regresaba a Alfonso Ugarte con Bolívar para formar y en la noche salía a las 10:00, nuevamente me iba hasta el Rimác a recoger a mi hija e ir a mi casa, era complicado, así estuve casi cinco años hasta que mi esposo regresó y compartíamos las cosas, cuando él trabajaba yo estaba de franco y me quedaba en la casa y así nos turnamos para velar por nuestra familia”, explica.
Tuvo a su segundo hijo en Huánuco y a veces era complicado porque ambos estaban de servicio. “Mi esposo lo llevaba al trabajo, luego la chica que nos ayudaba iba a recoger, pero era dificultoso porque la niñera nos robaba, no tenemos más familia pero a la fecha mi hijo tiene seis años y ahora que mi esposo está en retiro me ayuda bastante”, manifiesta.
Jenifer Delgado, como instructora dicta charlas a sus colegas de tránsito, también en los colegios de nivel inicial, primaria y secundaria. A las municipalidades, empresas de transporte y es profesora en la Escuela Policial de Santa María del Valle.
VOCACIÓN. Al ser consultada sobre la corrupción, dijo que está en todos los sectores del Estado. “La corrupción está en todas partes no solamente en la policía, donde deben empezar haciendo una buena selección de los postulantes, pero como postulan muchos no verifican su domicilio y antecedentes como lo hacían antes y eso permite que algunos jóvenes ingresan no por vocación sino por necesidad”, dice la técnico al tiempo de aclarar que la institución está trabajando para erradicar a los malos policías, porque les hacen quedar mal.
Asimismo pidió a la ciudadanía en general confiar en su policía, porque no todos son malos. “Confíen en su policía porque estamos prestos a servirlos en cualquier momento no solo cuando estamos de servicio”, dijo al recordar una anécdota cuando llegó a Huánuco.
“Al poco tiempo que llegue a Huánuco fui designada para hacer servicio en el óvalo Esteban Pavletich, donde un escolar con su maleta estaba parado casi una hora y me acerqué a preguntar porque no iba a su colegio y el menor me respondió, porque no tenía para su pasaje y que estaba esperando a su tío. Paré una moto y le envié a su colegio, esa acción me había olvidado porque pasó mucho tiempo, pero luego cuando llegué como instructora al colegio Honores, el menor tras saludarme me invita una manzana y un plátano, asombrada le pregunté porque lo hacía y me respondió, usted una vez pagó mi pasaje, esa respuesta me causó mucha alegría, placer porque yo me había olvidado del niño, pero él a mí no me olvidó”, narró la agente.