
Esta madrugada, momentos de terror vivieron los huéspedes del hotel Imperial y los dueños de locales comerciales ubicados en la cuadra 5 del jirón Huánuco y cuadra 7 del jirón Abtao, luego que un dantesco incendio arrasó con mercadería de las tiendas. La emergencia que movilizó a policías, serenos y bomberos se habría originado en una tienda de muebles y al no poder ser controlado se extendió por la parte posterior hasta llegar al jirón Huánuco, donde la tienda El Sótano, fue el más afectado.
Los hombres de rojo demoraron de acudir a controlar el fuego debido que las baterías de sus unidades están inoperativas, por lo que reclaman apoyo del gobierno regional y local.
Otro problema que afrontaron los bomberos es la falta de agua, por lo que tuvieron que pedir la intervención de Seda Huánuco. Entre tanto, la desesperación de los comerciantes era evidente que a gritos pedían ayuda con cisternas de agua, porque el fuego amenazaba con llegar a las tiendas y arrasar sus mercaderías.
Al otro extremo, en la cuadra 5 del jirón Huánuco, trabajadores y propietarios de las tiendas sacaban su mercadería al medio de la pista con la finalidad de poner a buen recaudo y evitar ser alcanzado por el dantesco incendio. En reiteradas veces, hicieron un llamado a los representantes de Corpac para enviar la cisterna y poder controlar el fuego que consumía muebles, prendas de vestir, juguetes, entre otros.
Los dueños de la tienda Mega Plaza, denunciaron que los bomberos que llegaron al lugar, no tenían agua y después de dos horas que el fuego estaba incontrolable recién actuaron, al respecto, el comandante general de la compañía de bomberos Keler Hidaldo Pasquel, que personal humano hay, pero el problema es logístico, esto debido que tiene una cisterna de más de 10 mil litros de agua que necesita ser reparada, pero ninguna autoridad responde a los oficios que envió pidiendo ayuda.
Algo +
El fuego también alcanzó los cables de luz, por lo que tuvieron que cortar y así evitar una tragedia mayor. Al cierre del informe que fue a las 3:00 de la mañana, el fuego seguía y esperaban la respuesta de Corpac con la cisterna.