Elizabeth Saly Deza Laurencio*
No ha de acicalar los ojos y el corazón de su hijo con vagas utopías, exaltando a un Título Académico Universitario como el único sostén principal de una vida plena y dichosa; más aún, si este heredó la sangre artística.
El sábado 5 del presente, en el cierre de la FIL HUÁNUCO (Feria Internacional del Libro de Huánuco) en homenaje al maestro Andrés Cloud fue presentado un documental sobre su biografía y su trascendencia en la literatura; del mismo, pude rescatar que para el escritor Cloud el arte habría de ser un elemento que jamás se debería dejar de cultivar y que un artista ha de vivir apasionado y muy enamorado de lo que hace; ya sea de la música, la danza, la pintura, la literatura, entre otras facultades de las cuales emanan belleza.
Sin embargo, aquí es cuando empezamos a inspeccionar y ver moderadamente el aspecto artístico que desempeñamos en la región; pero, como usted sabrá, en pintura, teatro, literatura y más, todavía trabajamos en recuperar la atención de aquellos que aún admiran nuestro trabajo. Evidentemente mendigamos seguidores, pero no es porque queremos reconocimientos, sino porque queremos mantener, cultivar y llevar hacia arriba lo que Huánuco puede producir.
Eduardo Espinoza (El Zorro) es un gran artista huanuqueño al igual que él hay muchos que pintan, cantan, bailan y escriben con entusiasmo, pasión y vocación; pero, son pocos, ahí es cuando nacen las siguientes interrogantes, ¿a quiénes los consideramos artistas? Si en el hogar, algún miembro de su familia decide dedicarse al arte, ¿usted qué haría? En el país, el ministerio de educación promueve el crecimiento de muchos artistas (en su etapa de formación académica) a través del curso y los talleres de arte, con el fin de poder amoldar la formación integral de cada estudiante; esta implementación, en mi opinión, ¡está muy bien! Porque un gran artista nace y se hace en el camino, empero cuando la ignorancia nos gana, llevamos a nuestros hijos a aislarse, separarse y alejarse de estas facultades estupendas. Entonces ¿Qué hacer al respecto? Comprendo que usted quiera lo mejor para su hijo, por eso elige inclusive llevarlo a un buen colegio privado, pero ¿alguna vez averiguó si en la institución educativa se desarrolla el curso de arte como corresponde? Y si lo hizo, ¿lo desarrollan hasta culminar el quinto de secundaria? Y si su hijo estudia en un colegio estatal, ¿alguna vez apoyó su interés de asistir a los talleres de arte? Por último ¿Sabe si su hijo conoce la Escuela de Bellas Artes? Posiblemente su respuesta no ha de ser factible para nuestros oídos, porque sea SÍ o NO, nuestro interés como sociedad de hoy se ve manchada con falsas creencias de: SÍ ERES ARTISTA, TE MUERES DE HAMBRE.
En efecto, para resurgir el interés artístico de un estudiante en un colegio público o privado, no se requiere solo de publicidad o de palabras bonitas de los que dirigen el mismo, disfrazando lo que poco o nada se hace al respecto… No los culpamos, simplemente no entendemos su coherencia, debido a que escasean auténticos maestros artistas. Un artista vive indignado cuando no sabe a quién heredar la posta de su vocación, más aún cuando uno observa que los cursos de arte se llevan solo hasta el segundo grado de secundaria, peor aún, cuando la educación se convierte en un negocio sin fondo ni forma. Nosotros somos los responsables, porque ahogamos la rica cultura huanuqueña, refrenando a nuestros hijos de sus gentiles gustos.
CON UNA ACTITUD QUIJOTESCA, SÉ ARTISTA, SÉ HISTORIA Y SÉ VALIENTE.
*Docente Bachiller de Lengua y Literatura. Escritora Pachiteana, integrante de la AEH (Asociación de Escritores de Huánuco).