Ahora, los peruanos podemos afirmar con certeza que el pisco es un producto genuinamente peruano. Aunque nunca estuvo en duda, la reciente inscripción en la UNESCO fortalece su identidad y lo respalda oficialmente. En una ceremonia especial, se entregaron los certificados que acreditan la inscripción de los manuscritos sobre el origen peruano del pisco.
La inscripción fue posible gracias al descubrimiento de documentos históricos de 1587 y 1613, hallados este año por el Archivo General de la Nación, los cuales prueban que la producción y comercialización del pisco en Perú datan de tiempos coloniales. Con esta inscripción, la UNESCO reconoce al pisco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad de origen peruano.
Johnny Schuler, presidente de la Academia del Pisco, destacó la trascendencia de este hecho, subrayando la importancia de la validación de los documentos que respaldan la autenticidad del pisco como un emblema nacional