
Un hecho alarmante de violencia intrafamiliar ha sido reportado en Puno, donde una madre, junto a su pareja, enfrenta acusaciones por quemar el antebrazo derecho de su hija de 10 años como castigo. Según se informa, el incidente ocurrió el pasado 27 de abril en la residencia ubicada en la urbanización Las Torres. La denuncia se originó gracias a la intervención de la abuela de la niña.
Según los informes, la madre habría justificado el acto como una respuesta al supuesto hecho de que la menor tomó dinero sin su consentimiento para adquirir alimentos mientras se encontraba sola en casa y sin recursos para alimentarse. Este incidente, que habría pasado desapercibido en el seno familiar, salió a la luz gracias a la intervención de la abuela, quien denunció el incidente a la línea de ayuda 100.