Dormir entre siete y ocho horas sin interrupciones es una de las mejores formas de cuidar nuestra salud. De no hacerlo estaríamos afectando nuestra calidad de vida, directamente en el rendimiento físico diario y, por consiguiente, perjudicando el desempeño rutinario como el trabajo.
“La falta de sueño está ligada a la depresión, la ansiedad y los problemas psicológicos; además, afecta la capacidad de atención, la recuperación de la memoria y el aprendizaje”, explica el doctor Héctor Yaya, médico neurocirujano de Sisol Salud, quien recalca que el descanso nocturno es muy importante para tener una buena salud mental.
El especialista explica que por la noche se regenera el tejido cerebral y físico. Si no hay descanso, no hay una recuperación correcta y eso afecta directamente al rendimiento, tanto físico como intelectual.
El doctor Yaya resalta que dormir bien es uno de los tres pilares fundamentales para gozar de una buena salud, además de una dieta equilibrada y ejercicio regular.
En ese sentido, aquellos que sufren privación de sueño tienen un riesgo mucho más alto de padecer enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y depresión.
La falta de sueño hace que nos alimentemos mal; solemos comer alimentos poco saludables, y por eso la falta de sueño está vinculada con el aumento de peso y otros trastornos metabólicos que conllevan a hipertensión o diabetes.
Estas son solo algunas de las consecuencias de dormir poco; no en vano, la falta de sueño interfiere directamente en el rendimiento físico, ya que el cuerpo necesita un mínimo de horas de descanso. Y es que dormir bien, en realidad, es un sueño para muchas personas.
EL INSOMNIO
No siempre es posible conciliar el sueño de una manera inmediata, pero sobre todo reparadora. Por ello, las causas del insomnio son diversas.
Entre ellas podría darse un componente genético, de salud, ambiental o educacional. Hay personas o grupos familiares que despiertan muy temprano o, por el contrario, suelen iniciar el proceso de descanso muy tarde. Ello solo refleja formas distintas de enfrentar el proceso de descanso.
Sin embargo, cuando hablamos de factores asociados a la salud, el insomnio puede presentarse en personas con problemas, por ejemplo, de acidez, reflujo gastroesofágico o asma que les impide tener un sueño reparador, ya que se ve interrumpida por estos factores.