(Puerto Inca, crónica 1)
Decidimos jugar otro partido para ganarlo. La partida desde Huánuco aumenta mis latidos. Aquella noche corre por la pista, el deseo de querer conocer Puerto Inca va sobre ruedas, el carrito verde petróleo utiliza gas y pertenece a la flota de Marginal Express, corre tanto que cada cierto tramo bebe agua por botellas. ¿Será acaso el radiador? ¿Será tal vez el peso nada aligerado de los usuarios? ¿Será el cambio ambiental de pueblo a pueblo?
Subir para bajar, léase Huánuco-túnel de Carpish-Tingo María; volver a subir para bajar con éxito, o sea, Tingo María-Divisoria-Aguaytía. Traspasar Carpish equivale a un gol bien elaborado, alegría sin par.
MAPA DE RUTA
00H00 Huánuco y el Pillcomozo lanzan un hondo suspiro de alivio cuando observan partir a la comitiva unhevalina. ¡Vale! Hubo doble suspiro por el retorno universitario. ¡Recontravale!
03H00. Tingo María descansa con la Bella Durmiente, aquel paisaje nocturno exige respeto, pasamos en silencio, el motor hace mutis, los pasajeros quedan anonadados, las llantas piden reemplazo y el radiador pide agua porque tiene una resaca inexplicable, así estuvo durante todo el viaje.
Pasamos por el distrito “Hermilio Valdizán”, por aquí, en cualquier día de la semana, a partir de la una de la madrugada pasan los vehículos provenientes de Pucallpa que van hacia Lima, Huancayo, Huánuco, en ese orden, Turismo Central viaja como tal.
03H40. El sitio de nombre Previsto me hace sacudir la cabeza, ya que inicia el descenso de modo sutil.
03H55. El velo transparente de la novia asperje a la gente, aunque no falta alguien con remilgos o melindres de jovencita huidiza. Contiguo está el túnel o cueva del boquerón,
04H05. Retomamos el viaje y pasamos por la ducha del diablo. Moja y remoja el agua, empapa y tapa el descendiente de Mefistófeles.
La tranquera pone stop al viaje. Movibus espera sin chis ni mus, el piloto de Transmar pide mucha agua de azar, Marginal Express brinda café a tres. De ida “reposamos” una hora y en el regreso “descansamos” tres horas lunares. El mapa de ruta sugerido no considera esos minutos que nos pillaron entre letreros y luna medrosa, entiéndase como expresión coloquial.
04H10. El Boquerón Pueblo sabe cuándo hablar, también sabe escuchar.
04H15. La Libertad vive aprisionada en el conteo de idas y venidas.
04H30. Aguaytía estira los brazos extendidos hacia la neblina en medio de la carretera. El puente color zanahoria deja pasar a vegetarianos y todo mortal. Este viaducto sobre el río Aguaytía quizá sea uno de los más largos del Perú. Amor hay que medirlo para salir de dudas. 765 metros de obra genial.
04H35. Guacamayo despierta oyendo nuestro trajín. El verde nació risueño en el bosque cuando pudo apreciar el bostezo rojo de los atardeceres, en tanto, el azul trata de conservar este amanecer, también el siguiente, armonía azulada.
04H40. Un letrero indica que hemos avanzado 17 km desde Aguaytía, de retornó asimile que le falta 17 mil metros para llegar hasta Aguaytía.
04H50. Huipoca. Aquí vive mucha gente que ha migrado de Pachitea. El néctar en lata cuesta cuatro soles.
04H55. Llanta Blanca. Nombre curioso para indagar en otras visitas.
05H00. San Pedro de Chío. Luego, 05H20, Shiringal Bajo.
05H45. El vecindario de San Alejandro tiene considerable población y necesidades. La noche se evapora con las nubes del nuevo día, San Alejandro pertenece a Pucallpa. El pueblo cruzamos en siete minutos. Nuevos paisajes, apuntes de siempre.
05H50. Villa El Salvador predica oportunidad que acogen los de Nuevo Oriente, incluso los de Asunción del Aguaytillo con su respectivo cigoñal (06H02).
06H07. Nueva Esperanza cree en el presente para que no sea sorprendido con el venidero incógnito.
06H12. Pasando la voz a Nuevo Ucayali, también a Nueva Esperanza, arribamos al km 86 o poblado Alexander Von Humboldt capital inherente al distrito del mismo nombre que fue creado recientemente (Ley 30310 del 16-marzo-2015), provincia de Padre Abad.
Llámese así porque dista a 86 km de Pucallpa, capital de la región Ucayali. A toda hora hay movimiento en este lugar. Restaurante-hospedaje, hombre-maquinaria, naturales-visitantes, conductores-pasajeros, empleadores-empleados.
Yendo de frente llegará hasta Pucallpa por la carretera “Jorge Basadre”, la bifurcación hacia la derecha le pondrá en Puerto Súngaro, Puerto Inca, Ciudad Constitución, Puerto Bermúdez. Ciudad Constitución dista doce horas desde la villa de Huánuco. La carretera afirmada es una línea terrosa, ancha de cuatro carriles, cuando llueve la vía parece jabonosa porque el vehículo bambolea y debe reducir la velocidad, pero cuando solea el viaje es fluido, divertido y ligero, eso hemos comprobado en nuestro periplo. De ida viajamos dieciséis horas, de retorno lo hicimos en seiscientos minutos.
Carachupa o armadillo, pollo, res o doncella fueron las opciones estrictas para degustar. La doncella estuvo primorosa, es decir, ni huesuda ni pellejuda solo carne digerible.
06H22. Primavera. Las gallinas madrugan porque temprano descansan, el ser humano madruga para efectuar sus cosas con la frescura matinal. El cuerpo bronceado de la gente delata a cuantos grados centígrados llega el calor en el día.
06H24. Macuya. El ensanchamiento destruye árboles, granjas, pero trae más pueblos, genera empleo.
07H30. Santa Rosa de Pata, km 28.
08H40. Pueblo de Puerto Súngaro dista 149 km, aproximadamente, desde el km 86. Hay terminal terrestre para ordenar la ciudad.
09H10. El astillero de Puerto Inca espera con entusiasmo. Boteros (transportistas fluviales), vendedores de refrescos, guías, naturales y visitantes quedan embelesados.
La provincia de Puerto Inca, en la región Huánuco, fue creada por Ley N° 23994 del 19 de noviembre de 1984, autógrafa de Fernando Belaunde Terry. Continuará…
*“El Puchkador de la Nieve”
