Comenzó a pagar con goles el valor de su contrato. Y, de paso, puso “en pausa” a quienes afirman que ya es un jugador acabado. Paolo Guerrero, ‘El Depredador’, salió de caza y le dio la victoria a Liga de Quito sobre Deportivo Ñublense por la Copa Sudamericana.
El delantero peruano, intratable en el área rival, anotó en el minuto 60 el gol del triunfo con camiseta blanca, tras recibir un servicio prácticamente el punto penal y quedar mano a mano con el portero sureño.
Hubo mérito en el servicio desde la banda derecha, porque el envío sobra por alto al central rojo –que intenta despejar de cabeza y queda desairado–, pero el reconocimiento mayor es para Guerrero.
Paolo recibe con el pecho y hace control orientado para ‘matarla’ y dejarla lista para su pierna derecha. Solo frente al portero rival, cualquiera pensaría en romper la red, pero ‘El Depredador’ apela a un toque suave, colocado, como el atacante cuajado que es.