Organizaciones sociales de Huánuco anunciaron para hoy y mañana un paro de 48 horas en rechazo a la decisión del Gobierno de avalar la venta de la Hidroeléctrica de Chaglla a la  empresa China Three Gorges Corporation. El planteamiento es que dicha planta, que aún está en manos de la empresa Generación Huallaga de propiedad de Odebrecht, pase a la administración del Gobierno Regional de Huánuco.

¿Qué posibilidades hay sobre esa pretensión de que la central hidroeléctrica de Chaglla pase al manejo del gobierno regional? Nada manifiesto. Entonces una paralización sobre algo que no tiene algo de viable, en lugar de ser beneficioso resultará perjudicial para los intereses de Huánuco.

No olvidemos que en el trabajo para dar con los peces gordos de la corrupción propiciada por Odebrecht, está el acuerdo de colaboración eficaz firmado entre la fiscalía peruana y la constructora brasileña que tuvo como factor definitivo el monto de reparación civil que saldría precisamente de la venta de la hidroeléctrica.

De los US$ 1,400 millones que costaba la hidroeléctrica Chaglla en el 2017, Odebrecht probablemente recibirá cerca de US$ 640 millones por la venta. La mitad de ese monto se destinará al pago de daños y perjuicios al Gobierno peruano, el resto será para acreedores, proveedores, trabajadores y Sunat.

Llegar a la firma del acuerdo de colaboración eficaz no fue desde luego tarea sencilla. Por lo que impulsos en contra o un mal movimiento del Gobierno, podría frustrar tal pacto, por ende las investigaciones de corrupción.

Hay que tener cautela con este tema, sobre todo cuando hay gruesos intereses. El objetivo es procesar y condenar a los personajes que participaron de la trama de corrupción más grande de los últimos tiempos en el país.