El vehículo que sufrió una volcadura en el km. 9.4 de la carretera Huánuco – La Unión, altura del puente Yuracyacu en la jurisdicción del distrito de Quisqui; fue un volquete que sin reunir las condiciones de seguridad, ni estar diseñado para ello trasladaba una maquinaria pesada (retroexcavadora). El hecho causó el corte general del servicio de agua potable en las ciudades de Huánuco, Amarilis y Pillco Marca.
Según el acta realizada por las autoridades en el lugar de los hechos, se trata del volquete COI-790 marca Iveco que era conducido por Alfredo Atencio Verástegui; en tanto la maquinaria modelo 420 F marca Caterpillar tenía como conductor responsable a Humberto Palma Tineo, quienes serán investigados por peligro común y delito ambiental.
El accidente ocurrió a las 8:40 de la noche del miércoles. Al volcarse la unidad, la maquinaria pesada cayó a unos cinco metros del cauce del río Higueras, derramando una pequeña cantidad de combustible de su tanque. Ante el hecho, la alerta fue dada por personal de la compañía CR20 que construye la vía en la zona.
En el documento precisa que ninguna de las unidades pertenece o trabajan para CR20; sin embargo, esta empresa apoyó para la recuperación de los vehículos y la limpieza del combustible derramado usando un kit antiderrame.
SEDA. Tras confirmar que la maquinaria pesada que era transportada en un volquete derramó una cantidad mínima de combustible, cerca al río Higueras; el jefe de la oficina de Imagen de Seda Huánuco, Juan Carlos Gonzáles, refirió ayer en la mañana que por disposición de las autoridades esperaban el resultado del análisis para restablecer el servicio de agua potable.
“Las autoridades han dispuesto que se haga un análisis a una muestra de agua de la planta y estamos a la espera de ello y validen los resultaos, para restablecer el servicio, en tanto no hay autorización para abastecer”, dijo el funcionario.
No habló de plazos, pero señaló que dependía si validaba un análisis en Huánuco o tenía que ser un laboratorio acreditado en Lima, para el cual coordinaban con el sector Salud.
Gonzáles precisó que el agua reservada en la planta era 100% potable ya que al activar los protocolos cerraron la compuerta de captación en Canchan y no entró luego de ocurrido el accidente.