El notario de Pachitea, Guillermo Enrique Bermúdez Talavera, de 65 años de edad pasó por un mal momento anoche. Fue rescatado por miembros de la compañía de bomberos Salvadora Huánuco N° 52 y la unidad de Rescate de la Policía Nacional, tras el desplome que sufrió del techo de una parte de la antigua casona familiar de dos pisos, ubicada en el Jr. Dos de mayo 986.
Según relatan, la causa del desastre habría sido originada por la remodelación que hacen en el primer piso del inmueble, donde funciona el negocio ‘El Trapiche’, y al parecer, también las lluvias.
El derrumbe se produjo a las ocho de la noche aproximadamente cuando el techo de la vivienda se cayó sobre el cuarto de Guillermo, quien descansaba en una habitación del segundo nivel.
Las puertas de acceso quedaron obstaculizadas por lo que los bomberos tuvieron que rescatarlo con escaleras y arneses por la ventana del segundo piso que da a la céntrica calle Dos de Mayo.
Ante la mirada de los transeúntes, vecinos y familiares, fue rescatado ileso para luego ser atendido por el personal médico del Samu, quienes diagnosticaron que el notario se encontraba con crisis ansiosa, además de presentar dificultad para respirar, pero nada de gravedad.
En la casona también quedaron atrapados tres niños, tres mujeres y un varón, quienes fueron rescatados por la cochera de una vivienda que colinda con el predio afectado, entre los que se encontraba el fiscal Miguel Reátegui y sus menores hijos de 9 y 2 años.
Un familiar, comentó que vivieron momentos de pánico y angustia porque tuvieron que desocupar las habitaciones, en medio de la lluvia.
EN ACCIÓN. Al mando de la policía estuvieron el St3 PNP Cometivos Cámara Juan y S1PNP Ríos Sacramento Albert, quienes se encargaron junto al personal de serenazgo en cubrir la zona para evitar que hayan más heridos o interrumpan el trabajo de rescate que venían realizando los bomberos al mando del Capitán CBP Ángel Huaranga Archiraico.
El interior del vivienda hay algunos tablones de madera que impidieron que colapse la pared principal y que se desplome totalmente el techo, lo que salvó al notario de otra consecuencia. Según se pudo observar, la antigua casa hecha de tapial, carrizos y otros materiales se encuentra destruida en su interior.
