Siguen los maltratos a los pacientes en el Hospital Regional Hermilio Valdizán. Esta vez es una paciente de 68 años asintomática y que debido a la diabetes que sufre estuvo siete días en una carpa cerca del servicio de emergencia del nosocomio a la espera de ser operada. La justificación para no llevarla a la sala de operaciones, era que el personal podría contagiarse con el SARS COV-2.
La situación que la humilde mujer vivió todos estos días, no sólo causó indignación en sus familiares que son de condición humilde, sino también de los trabajadores del nosocomio que a diario ven como algunos profesionales no cumplen con su función. Es así, que nos proporcionaron fotos de la celebración del cumpleaños del anestesiólogo Aron Rodríguez, quien sin mascarilla y rodeado con los que trabajan en el centro quirúrgico degusta de una deliciosa torta con café y tamal, mientras que la señora de iniciales E. V. D. S. (68), tenía que esperar con el pie infectado para ser operada.
“Mientras la señora y su esposo que es otro anciano que son de condición humilde esperaba la voluntad del personal de salud para ser operada, los del centro quirúrgico que no querían programar y recibir a la paciente por temor a ser contagiados con el Covid-19, celebraba el cumpleaños de uno de los anestesiólogos del hospital y las fotografías que publicaron en sus redes sociales, muestra que todos están sin mascarillas”, dijo una fuente de Tu diario.
La señora que tenía el pie infectado a raíz de la diabetes fue programada para ser operada el 13 y 14 de febrero, pero por falta de anestesiólogo, el cirujano no pudo amputarle la pierna. Su hija Flor Karina Santiago Verde, hizo la denuncia pública, indicando que su madre no estaba recibiendo medicamentos para calmar su dolor, tampoco había comido dos días.
Algo más
Después de tres programaciones, ayer a las 6:00 de la tarde, la paciente ingresó a la sala de operaciones, pero hasta el cierre del informe no salía.
