Entre ellos figuran médicos, enfermaras, tecnólogos médicos, técnicos de enfermería, entre otros
Una nueva generación de jóvenes profesionales de la salud se suma al Seguro Social de Salud para formar parte de la primera línea de atención, dispuesta a prestar servicio en las diferentes áreas covid-19 a nivel nacional
Se trata de médicos, enfermeras y tecnólogos médicos, técnicos de enfermería, entre otras especialidades quienes han decidido ponerse la camiseta del Perú y con ímpetu, compromiso y entusiasmo han llegado a la institución como una inyección de energía en medio de la pandemia del coronavirus.
El trabajo, lleno de dinamismo, que realiza la nueva generación de profesionales ha contribuido a fortalecer las atenciones en los principales nosocomios de EsSalud, principalmente en Lima y Callao, así como en Iquitos y Lambayeque, estas últimas las ciudades más golpeadas por el virus en medio de esta pandemia
A la fecha, EsSalud contrató a 4, 000 profesionales de la salud para atender a los pacientes Covid-19. De este total, más de tres mil son jóvenes menores de 30 años que han obtenido plazas en diferentes partes de nuestro país, todos con el único deseo de aplicar sus conocimientos y salvar vidas.
“Ellos saben cuán importante es su presencia en cada una de nuestras áreas de emergencia covid-19, son el complemento perfecto de los médicos con mayor experiencia, su energía y vitalidad ha logrado fortalecer enormemente las emergencias” señaló Jorge Perlacio, vocero de EsSalud.
Cabe destacar que, el 90% de este reconocido grupo no pasa de los 30 años, de hecho, para muchos la zona de
emergencia para atender casos con coronavirus es su primer trabajo duro y se sienten muy orgullosos de mostrar lo aprendido.
“Si te necesitan, por qué no ayudar”
Un ejemplo de valor de esta nueva sangre, es la médico general Briggitte Cruz; quien ha sido parte de uno de los contingentes de profesionales de salud destacados a Iquitos.
“Será una experiencia que jamás olvidare, fue mi primer trabajo y precisamente en una de las zonas con el mayor nivel de contagio. Hice mucha ayuda social en la adolescencia, pero definí convertirme en médico cuando tenía los 16 años e ingresé al voluntariado juvenil “Kúrame” del hospital Edgardo Rebagliati”.
Allí visitaba a pacientes y los hacía divertirse. Así mitigaba su tristeza y ayudaba en su recuperación. EsSalud le ofreció la oportunidad y sin pensarlo dos veces llegó hasta el hospital III en Iquitos.
Si te necesitan, por qué no ayudar”, afirma. Tiene apenas un año y medio de matrimonio y cuenta con el absoluto respaldo de su esposo, quien solo le repite a diario, que se cuide.
Estuvo en contacto directo con pacientes Covid-19, pero volvió a casa sana y salva. Ahora solo espera regresar a Iquitos para seguir dando todo de sí. Su padre jubilado de la unidad de salvataje de la Policía Nacional fue siempre su mayor inspiración.
“Atendí a mi profesor”
Desde pequeño en su natal Puno, Alexander Chuquimia tuvo la convicción de ser médico para poder salvar vidas. Hoy que se desempeña como intensivista del hospital Alberto Sabogal de EsSalud siente más que nunca la vocación por el servicio que realiza, más aún cuando lograr arranchar de los brazos de la muerte a un paciente.
“No hay nada más reconfortante que devolverle la vida a una persona y ver como ella regresa con su familia. En esta emergencia he tenido muchas experiencias y anécdotas; la que más me impactó fue la de atender a mi profesor que llegó en estado crítico a la unidad de cuidados intensivos, un ex jefe que tuve y del que aprendí mucho en la medicina. Cuando todo pasó y él estuvo en área de recuperación, verlo con su esposa, feliz de seguir con vida, fue uno de los regalos más grandes que he tenido”.
Mi familia está orgullosa
David Estela siempre admiró a su madre, obstetra de profesión, fue ella quien lo motivó y hoy 29 años después, no sólo tiene la especialidad en obstetricia y ginecología, sino que además realizó un proyecto de investigación muy interesante: “”Factores asociados a infección reciente por covid-19 durante confinamiento social en pacientes internados en el centro de atención y aislamiento Villa Panamericana”, el cual ganó el premio Kaelin. Hoy trabaja con pacientes covid en la Villa Panamericana.
“Es un reto para mí enfrentar el coronavirus. Mi familia se preocupó, pero a la vez se siente orgullosa por la labor que realizo. Soy hijo de madre obstetra. Mis expectativas ahora son seguir luchando contra el covid y contribuir con el cuidado de los pacientes infectados con este virus”, acotó.
Brigitte y David pertenecen a una nueva generación de profesionales de la salud, aguerrida, comprometida con el país y reclutada por EsSalud, con el ánimo al tope para lograr la recuperación de los pacientes que sufren con la mortal enfermedad del coronavirus.
//Andina.
