Expertos en saneamiento físico legal y delimitación de sitios arqueológico usaron drones para fotografía el complejo monumental arqueológico de Huanacaure, en el distrito de San Pablo de Pillao. Asimismo, especialistas del Ministerio de Cultura emplearon un GPS diferencial para delimitar con precisión el área total de la huaca.
Estos trabajos se realizaron durante tres días por la comitiva que fue hasta Huanacaure, con el propósito de iniciar los estudios técnicos de saneamiento físico legal y de delimitación. Estas primeras acciones permitirán poner en valor la zona monumental del sitio arqueológico.
El complejo arqueológico de Huanacaure es considerado como “el otro Machu Picchu”, pero está cubierto de maleza. Por esa razón, la puesta en valor permitirá que el Estado destine presupuesto para la ciudadela y su historia. En el lugar, los investigadores del Qhapaqñan encontraron restos de cerámica y objetos líticos
En 2002, el maestro Silverio Camones, con la guía de moradores de Pillao, llegó a Huanacaure, topándose con su grandiosidad. Después de este primer contacto, hubo expediciones en 2003 y 2006, donde los arqueólogos Denesy Palacios y Ernesto Lázaro hicieron los primeros estudios técnico-científicos.
Así se estableció que data de la época pre-inca e inca. Inicialmente ocupada por la etnia de los Chupaychos, quienes se adaptaron fácilmente a la ocupación inca. Fue el incanato quien le dio a Huanacaure el realce que tuvo, pues se convirtió en un centro ceremonial y estratégico por ser puerta de entrada a la selva.
Visitar Huanacaure es sentirse descubridor. Desde el camino, nadie imagina que en esos cerros boscosos existe una enorme ciudadela.