En la visita de control desarrollado a la programación, asistencia y permanencia del personal asistencial en cuatro establecimientos de salud de la Red de Salud Leoncio Prado, han detectado en alguno de ellos ausencia de personal asistencial, carencia de un adecuado registro de asistencia, inexistencia del libro de reclamaciones y el inadecuado almacenamiento de residuos sólidos comunes y biocontaminados.
Mediante el Informe de Visita de Visita de Control N° 027-2024-OCI/0691-SVC, publicado ayer en la página web de la Contraloría General de la República, el Órgano de Control Institucional de la Dirección Regional de Salud Huánuco, indica que son cuatro los establecimientos de salud a los intervinieron: Centro de Salud Castillo Grande, Centro de Salud Mental Comunitario Bella Durmiente, Centro de Salud Pumahuasi y Centro de Salud Las Palmas.
Entre las situaciones adversas detectadas, está la ausencia del médico AESH, sin la debida justificación, en el centro de salud Castillo Grande, generando el riesgo en la oportuna atención de pacientes y de pago de remuneración sin garantizar el cumplimiento de la jornada laboral.
El establecimiento de salud Centro de Salud Mental Comunitario Bella Durmiente, del ámbito de la Red de Salud Leoncio prado, carece de un adecuando registro de asistencia y permanencia del personal, generándose el riesgo de no contar con información fehaciente para el cálculo de descuentos por tardanzas y/ o inasistencias; así como, el pago de remuneración sin garantizar el cumplimiento de la jornada laboral.
Además, en el Centro de Salud Mental Comunitario Bella Durmiente, el centro de salud Pumahuasi y el centro de salud Las Palmas, no implementan adecuadamente el documento físico o virtual (libro de reclamaciones), situación que limita a los ciudadanos el ejercicio del derecho de expresar su insatisfacción o disconformidad mediante reclamos y/ o quejas, por vulneración del derecho a la salud.
Finalmente, hay un inadecuado almacenamiento de residuos sólidos comunes y biocontaminados en los centros de salud Castillo Grande, Pumahuasi y Las Palmas, lo que genera riesgos sanitarios, ocupacionales y ambientales, así como el impacto negativo a la salud pública y al ambiente.