
A cinco años del hecho de sangre, el Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de Huánuco tras valorar las pruebas presentadas por el Ministerio Público, por unanimidad resolvió condenar a 15 años de cárcel a los esposos Eddy Luis Calisaya Apaza (29) y Gloria Soledad Melo Varillas (38). Asimismo, ordenaron el pago de 80 mil soles por concepto de reparación civil a favor de la familia de Hipólito Atanasio Murga, asesinado de un disparo en la cabeza.
La ejecución de la sentencia, fue suspendida hasta que la Sala Penal resuelva en segunda instancia la apelación presentada por la defensa técnica y mientras tanto, los condenados deberán cumplir reglas de conducta, entre las que control virtual y están prohibidos de comunicarse con los representantes legales o familiares del agraviado.
CASO. El 15 de enero del 2016 como todos los días, Atanasio Murga, quien era llamado cariñosamente por sus amigos como «Pool» trabajaba como conductor y repartidor de pan para Ever Melo Varillas (hermano de la ahora sentenciada), salió muy temprano conduciendo el vehículo blanco de placa W3J-381 en cuyo interior llevaba bolsas de pan que repartía en la ruta de Huánuco a Puente Durand.
Debido que «Pool» era una persona carismática y atenta en poco tiempo supo ganarse la clientela en las tiendas y restaurantes ubicados a lo largo de la vía Huánuco a Tingo María y está acción molestó a la competencia que eran los esposos Calisaya Apaza y Melo Varillas, quienes también tenían su panadería. En un mes, los dueños de las tiendas preferían comprar a «Pool», dejando de lado a la pareja, hecho que les habría molestado a tal punto que planificaron sacarlo del camino.
Atanasio Murga continuó repartiendo pan y el día que fue asesinado, salió a las 4.00 de la mañana ganando a los esposos que también estaban repartiendo pan a bordo de un automóvil verde marca Daewoo, y cuando Luis y Gloria llegaron a Acomayo para dejar su mercadería, «Pool», ya estaba dejando su bolsa de pan, hecho que habría enfurecido más a la pareja.
Es así que en el kilómetro 74 de la carretera Huánuco a Tingo María, el ahora sentenciado bajó del vehículo, mientras Gloria Melo continuó su recorrido conduciendo el auto hasta más allá. Eddy Luis Calisaya esperó a “Pool” e hizo una señal y el padre de familia confiado sobreparó la unidad, hecho que fue aprovechado por el homicida para dispararle en la sien, matándolo en el acto.
Tras el crimen, Calisaya Apaza, natural de Puno, corrió con dirección hacia Tingo María y en ese instante fue alcanzado por otro vendedor de pan, quien en el proceso de investigación fue considerado testigo clave y fue él quien informó a las autoridades que el día de los hechos vio al “Gordo” corriendo e incluso subió a su carro.
“Al preguntar qué pasó con el carro blanco que estaba despistado en la cuneta, me dijo que había sufrido un accidente, por eso al recogerlo creí que estaba yendo a pedir ayuda, pero unos metros más allá al ver que venía un auto verde, me pidió bajarse del carro, hecho que me llamó la atención, horas más tarde supe que ‘Pool’ a quien conocía de vista había sido asesinado y a la única persona que vi corriendo cerca de la escena del crimen fue al ‘Gordo refiriéndose a Eddy Calisaya Apaza”, declaró el testigo clave y esta declaración fue tomada en cuenta por los magistrados para emitir la sentencia.
En el juicio oral, ninguno de los dos quiso declarar haciendo uso de su derecho de guardar silencio, pero cuando acudieron a la fiscalía el 11 de abril del 2017, la pareja que fue interrogada confirmó que el día que mataron a ‘Pool’ (vendedor de pan) a quien conocían de vista porque era trabajador de su familiar, dijo que estaba repartiendo sus bolsas de pan por el lugar e incluso vieron al carro en la cuneta, pero continuaron su recorrido sin fijarse si habia o no una persona muerta.
Algo más
Hipólito Atanasio Murga, era mil oficios y trabajaba para sostener a sus tres menores hijos que tras su muerte quedaron devastados y a través de su mamá piden justicia para su padre.