La familia del ingeniero metalúrgico Jonatan Gomero Carlos (30) tenía la esperanza de encontrarlo con vida, pero ayer después de siete días, la expectativa terminó, porque el cadáver que estaba flotando en la represa de la central Hidroeléctrica de Chaglla, era del joven ingeniero. Tras el hallazgo y recuperación del cuerpo sin vida, inicia una nueva etapa para la familia que quiere saber que, pasó con su ser querido.
Una llamada de Walter Vilchez, administrador de la Central Hidroeléctrica de Chaglla movilizó a los agentes de la Unidad de Rescate del Escuadrón de Emergencia que junto a un familiar viajaron a la zona. Luego de ser identificados, los agentes con sus respectivos equipos de rescate a bordo de un bote a motor navegaron por espacio de 20 minutos hasta llegar al lugar, donde estaba el cuerpo en estado de descomposición de un varón. En la diligencia de recuperación del cuerpo participó la fiscal adjunta Elizabeth Bonifacio Herrera, peritos de criminalística y agentes del área de homicidios del Departamento de Investigación Criminal.
Una vez que el cuerpo fue sacado de la represa y puesta al bote, fue trasladado hasta una zona segura, donde peritos de criminalística revisaron para ver si tenía alguna lesión, y evidenciaron una herida en la pierna derecha, pero está por determinarse si la lesión es producto del arrastre por el agua. Pese que el cadáver estaba hinchado y en avanzado estado de descomposición, el pariente que acompañó a los agentes logró identificarlo.
Los restos fueron metidos a una bolsa negra y subidos a la camioneta del Unidad de Emergencia para ser traídos de regreso a Huánuco y pasada de las 8:00 de la noche, el vehículo ingresó a la morgue, donde los agentes dejaron el cuerpo que sólo tenía puesto su pantalón azul, pero estaba recogido hasta sus muslos. De acuerdo a la programación de la División de Medicina Legal, hoy debe ser sometido a necropsia y el resultado deberá indicar si Jonathan murió ahogado, golpeado o quizás no encuentren evidencias por el avanzado estado de descomposición.
¿QUÉ PASÓ? El 20 de enero del presente año, su hermanito menor cumplió años y para esa fecha especial, Jonathan Gomero, quien tenía una vida hecha en la capital llegó para estar con el más pequeño de sus hermanos y precisamente las fotos que su familia compartió en las redes sociales, fueron tomadas en la reunión que los Gomero Carlos tuvieron. Pasaron los días y su amigo de colegio le invitó asistir a la discoteca Los Portales Sunset, ubicado en Amarilis.
Debido que el joven ingeniero no tenía costumbre de tomar bebidas alcohólicas aquella noche del 30 de enero y al amanecer 31 estaba mareado y cuando según, su amigo pidió ir a descansar, Jonathan habría dicho que quería quedarse y es lo que pasó. A las 2:45 de la madrugada del 31 de enero, la cámara de video vigilancia ubicada en la discoteca capta a Gomero Carlos saliendo del local, pero no camina normal, sino tambaleando por el exceso de licor que habría consumido.
Es lo único que su familia conocía hasta ese momento y al ver que no regresaba a casa y su celular estaba apagado, los padres acudieron al Departamento de Investigación Criminal para denunciar la desaparición de su hijo y en paralelo sus tías a través de las redes sociales hacían público el caso que rápidamente fue viralizado. Debido que en el aviso pusieron los números de celulares, uno de los jóvenes que la madrugada del 31 de enero habría ayuda a una persona con las mismas características de Jonathan, llamó a la mamá.
Dijo, que ayudaron a una persona que estaba inconsciente por Colpa Baja, lo subieron al trimóvil azul de placa 6258-CS y pidieron al mototaxista trasladarlo a la comisaría o al hospital, pagaron el pasaje y para evitar cualquier contratiempo tomaron una fotografía al bajaj, donde aparece uno de los jóvenes en la parte posterior del vehículo y sobre el asiento está recostado una cabeza que, sería del ingeniero.
El conductor de bajaj jamás llevó a Gomero Carlos a la comisaría mucho menos al hospital, al ser increpado por la familia que hizo con el pasajero, dijo que cuando lo estaba llevando al hospital de contingencia que está por La Esperanza, el ‘joven’ despertó y a gritos pidió bajarse del vehículo en una zona oscura. Es todo lo que la familia sabe, por eso exige a la policía y fiscalía investigar para conocer que pasó con Jonathan a quien recuerdan como un joven tranquilo, amable, bueno y estudioso.
ALGO MÁS
El mototaxista y el amigo con quien Jonathan salió a la discoteca serán llamados a declarar nuevamente, porque habría contradicciones en sus versiones.
