
En los últimos tres años, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), a través del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA), ha desarrollado 19 variedades de granos andinos de alta calidad genética que han incrementado hasta en un 80% el rendimiento por hectárea, dinamizando así la economía de más de 100 mil pequeños y medianos productores del país.
Los beneficiarios de esta innovación agrícola se encuentran en regiones como Áncash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco, Huancavelica, Huánuco, Ica, Junín, La Libertad, Lambayeque, Moquegua, Puno y Tacna. Midagri ha destacado su esfuerzo en el marco del “Día Nacional de los Granos Andinos”, que se celebra cada 30 de junio.
Este notable aumento en la productividad se atribuye a las nuevas variedades que poseen una alta resistencia a plagas y enfermedades, excelente rendimiento de cosecha, y niveles superiores de nutrientes, proteínas y antioxidantes. Además, presentan una destacable adaptabilidad frente a los efectos del cambio climático.
De estas 19 variedades mejoradas, 12 corresponden a cultivos de quinua, 4 a kiwicha, 2 a tarwi y 1 a cañihua. Estos cultivares fueron desarrollados en diversas Estaciones Experimentales Agrarias (EEA) del INIA a nivel nacional, mediante técnicas como cruzamientos controlados, caracterización agromorfológica, identificación de accesiones promisorias y evaluaciones en parcelas demostrativas.
Las incorporaciones más recientes al Catálogo Nacional de Cultivares Registrados incluyen las variedades de quinua INIA 438 Acollina, INIA 441 Señor del Huerto e INIA 446 Atipaq; en kiwicha, la INIA 442 La Frondosa; y en tarwi, la INIA 445 Masacanchino. Estas innovaciones permiten a los agricultores acceder a semillas certificadas de alto valor, optimizando la eficiencia y rentabilidad de sus cultivos.
CONSERVACIÓN. Además del desarrollo de nuevas variedades, el INIA destaca por su rol en la conservación de recursos genéticos. Actualmente mantiene cinco colecciones activas de germoplasma de granos andinos en bancos de germoplasma ubicados en distintas regiones del país. Gracias a la caracterización y evaluación de más de 3,000 accesiones, se han identificado materiales promisorios con alto valor genético.
Uno de los logros más relevantes ha sido la evaluación de 1,000 accesiones de quinua, identificando variedades con elevado contenido de proteínas, antioxidantes y compuestos fenólicos. Estas variedades pigmentadas se perfilan como ingredientes ideales para la industria de alimentos funcionales y nutracéuticos.
A través de su Dirección de Recursos Genéticos y Biotecnología, el INIA también lidera investigaciones en agrobiodiversidad, generando publicaciones científicas y técnicas de impacto nacional e internacional, como catálogos, manuales de manejo agronómico y estudios sobre variabilidad genética y nutricional, que contribuyen a fortalecer la productividad agraria del país.