
Según Telesur, l dea Guardia Revolucionaria de Irán (CGRI), fuerza de élite del régimen islámico, emitió este domingo una contundente declaración tras los bombardeos realizados por Estados Unidos contra tres instalaciones nucleares clave en el país: Fordow, Natanz e Isfahán.
“Ahora la guerra ha comenzado para nosotros”, advirtió la CGRI a través de sus canales oficiales, en respuesta directa a la operación militar confirmada por el presidente estadounidense Donald Trump. El mandatario aseguró que el ataque fue “exitoso” y que todos los aviones involucrados regresaron a salvo, tras lanzar una “carga completa de bombas” sobre Fordow, considerada la instalación más protegida del programa nuclear iraní.
La CGRI, creada tras la Revolución Islámica de 1979, es responsable de la defensa del sistema político iraní y controla tanto los misiles balísticos como las operaciones extraterritoriales del país. Su reacción marca una escalada significativa en el conflicto regional, que ya había alcanzado niveles críticos tras los recientes intercambios de misiles entre Irán e Israel.
Según medios iraníes, los sistemas de defensa aérea detectaron múltiples explosiones en las provincias de Qom, Isfahán y Natanz. Aunque Teherán no ha confirmado daños estructurales graves, fuentes estadounidenses afirman que Fordow fue “terminada” como instalación operativa.
El asesor del Parlamento iraní, Mahadi Mohammadi, minimizó el impacto del ataque, asegurando que “el lugar fue evacuado hace mucho tiempo” y que “no ha sufrido daños irreparables”. Añadió que Irán estaba preparado para esta ofensiva y que “el conocimiento es invencible”.
Este ataque representa la primera vez desde 1979 que Estados Unidos bombardea directamente instalaciones nucleares iraníes, lo que podría desencadenar una respuesta militar más amplia por parte de Teherán y sus aliados regionales.
La comunidad internacional observa con creciente preocupación el desarrollo de los acontecimientos, mientras crecen los temores de una guerra prolongada en Medio Oriente.