Una intervención policial a cargo del mayor PNP Alan Olivo Santana jefe de la comisaría de Amarilis, estuvo a punto de salirse de control, luego que un grupo de trabajadores del hospital Hermilio Valdizán salieron en defensa del encargado de Saludpol. La intervención por presunto abuso de autoridad cometido por funcionarios públicos, fue a raíz de la denuncia realizada por Marisol Niño Cisneros, esposa del teniente PNP William Reyes Puccio, quien la madrugada del 21 de febrero fue trasladado de emergencia al nosocomio regional por presentar síntomas de Covid-19.
Debido que dicho oficial no tenía la carta garantía documento primordial para la atención a los miembros de la Policía y sus familiares, tuvo que dejar su DNI y Carnet de Identificación Policial (CIP) para ser atendido por el médico del servicio de emergencia. Ayer, la esposa del teniente fue al hospital a recoger sus documentos, pero la encargada de la oficina de SOAT y convenios Yeni Sarmiento Berrospi, no habría querido entregar, aduciendo que debía presentar la carta de Saludpol o debía pagar la deuda generada.
Ante la denuncia de la esposa del oficial, el comisario de Amarilis, habría enviado al alférez PNP de apellido Campos para reclamar los documentos, pero no habrían querido entregar aduciendo que debía pagar los 204 soles que costó la atención, por lo que después de dos horas de ser paseado de un lugar a otro, tuvo que informar a su superior de lo que estaba pasando, por lo que el mayor Olivo personalmente acudió al hospital para intervenir.
Según los vídeos que fueron difundidos por las redes sociales, instantes que el suboficial redactaba el acta de intervención por presunto abuso de autoridad, los trabajadores con celulares en mano filmaban y reprochaban a los policías por haber ingresado violentamente a la oficina de Saludpol y convenios. Incluso uno de los asistentes, aseguraba que uno de los policías estaba borracho y pedía que realicen el dosaje etílico. En la intervención, los trabajadores del hospital no guardaban distanciamiento y a gritos pedían que salgan del lugar.
Hasta el lugar llegó el abogado Hernán Cajusol Chepe, quien fue llamado por el director del hospital. “La información que tengo, es que el personal administrativo solicitaba a los familiares del policía que había sido atendido, cumplir con la carta de garantía para entregar los documentos que suelen dejar en la parte administrativa y de esa manera el hospital tenga la garantía de cobrar por los servicios brindados y ante la retención de documentos, los familiares denunciaron en la comisaría de Amarilis y el mayor Olivo ha intervenido con más de 30 policías”, dijo en comunicación telefónica a Tu diario.
Asimismo, indicó que la aglomeración de trabajadores y la trifulca generada al interior del nosocomio fue por la violenta intervención policial a cargo del mayor Olivos Santa Ana a quien dijo que denunciará ante Inspectoría y Ministerio del Interior, sin embargo el oficial sólo habría ido con cuatro suboficiales, pero al ver que los trabajadores los rodeaban e insultaban pidió apoyo. Al final las imágenes de las cámaras de seguridad que existe en el nosocomio, determinará lo que realmente pasó al interior del hospital de contingencia.
FISCALÍA. Lo sucedido ayer en el hospital Hermilio Valdizán fue reportado por la Policía a la Primera Fiscalía Penal Corporativa de Huánuco para las diligencias de esclarecimiento de los hechos, porque no sería la primera vez que en dicho nosocomio retienen documentos u obligan a pagar las deudas que generan las atenciones a los policías y sus familiares. La poca comunicación que existe entre Saludpol y el hospital, genera hechos como lo ocurrido ayer, donde en plena inmovilización social hubo toda una trifulca al interior del nosocomio.
Al respecto, fuentes del nosocomio, indicaron que lo único que la esposa del oficial debió presentar para recoger los documentos que había dejado como garantía, era la carta de atención firmado por el Fondo de Aseguramiento en Salud de la Policía Nacional del Perú (Saludpol), pero como no llevó dicho documento no quisieron entregar hasta que pague la deuda generada por su atención.
Asimismo, aseguraron que, si la deuda no es pagada por el policía o su familiar, el monto es asumido por el trabajador a cargo de la oficina.
Algo más
El teniente Reyes Puccio necesitaba sus documentos para ser atendido en otro establecimiento, pero no podía porque su DNI y CIP estaba retenido en el hospital.
