Por Mg. CPC. Lizeth Cruz Carlos
Desde que inició el impacto del Coronavirus-19 en el mundo, la economía mundial está que decae lentamente, situación que preocupa a toda la sociedad mundial. En estos últimos días se vino una doble preocupación en los hogares peruanos de los aportantes al Sistema Privado de Pensiones; pues nunca se imaginaron que su fondo de pensiones se vería afectado grandemente con pérdidas económicas; pues no saben si enferma más la incertidumbre del COVID-19 ó la incertidumbre de no saber qué cantidad del fondo de pensiones les tocará cuando se jubilen; puesto que el tiempo que dure ésta crisis económica verán pérdidas considerables en sus fondos.
En estas circunstancias, los pensionistas se sienten abandonados por el Gobierno, pues éstos no mencionan soluciones para controlar y salvaguardar sus aportaciones, las mismas que mes a mes son depositadas en las arcas de las AFP siendo su cobranza hasta de manera coactiva y con cargos de más y, cuando piden explicación alguna de la razón de las pérdidas en sus fondos de pensiones, éstas se escudan y lo atribuyen a la crisis económica generada por esta pandemia.
Si, retrocedemos el tiempo; la promesa de las AFP para afiliarte y no desconfiar en ellas, era su respaldo y supervisión por la Superintendencia de Mercado y Valores, quien ahora brilla por su ausencia pues; no controló que estas pérdidas podían haberse evitado, sí; éstas AFPs desde el mes de diciembre cuando inició esta pandemia, hubiesen pasado nuestro fondo de pensiones al fondo 0 ó 1 (protección y preservación de capital), donde había menos riesgo de pérdida, pues los mas afectados con esta crisis son los aportantes del fondo 2 y 3 (Fondo Mixto y Apreciación del Capital).
¿Cómo aparecieron estos Fondos?
Bien sabemos que, las AFP utilizan los fondo de los aportantes para colocar capitales en algunas empresas millonarias generando rentabilidad, de esta rentabilidad la mayor parte va para los accionistas de las AFP y una minucia a los aportantes que, según ellos las rentabilidades más altas corresponden al fondo 2 y 3; pero al final éstas tasas asignadas terminan siendo bajísimas para todo los fondos y porque los altos porcentajes se quedan con las mismas AFPs; tal como podemos comprobar en el informe del 27 de marzo del año 2019 través del comunicados ante la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV), AFP Habitat informaron que se aprobó la distribución de sus ganancias del 2019 entre sus accionistas por un monto de 27 millones 318 mil 108 soles entre sus accionistas y, ahora que nos encontramos en crisis, se ve el otro lado de la moneda; estos señores se lavan la manos a lo Poncio Pilato y nos cargan toda las pérdidas a nuestro fondo de pensiones y, nos vienen con su cuento chino, que; confiemos en ellos y dejemos de preocuparnos pues más adelante recuperaremos nuestros fondos, es un cuento imposible de creer y más aún si te quedan solo meses para jubilarte y recibir tu fondo de pensión.
¿Qué nos dicen nuestros congresistas?
El pasado 04 de abril del presente nuestros padres de la patria, presentan el Proyecto de Ley Multipartidario que, faculta el retiro del 25% de los fondos de las Administradoras de Fondo de Pensiones (AFP), hasta por un tope de S/ 12,900 (3 UIT) y como un monto mínimo el de 1 UIT, suena bien, pero su aprobación y ejecución está en las manos de nuestro presidente Vizcarra, quien trata de callarnos con un caramelo de S/. 2,000 para retirar de nuestro fondo de pensiones para superar esta crisis.
La flamante Ministra de Economía no dice, mantengamos la calma y evitemos retirar nuestro fondo de pensiones pues; generaremos desequilibrio financiero, y ¿Acaso las AFPs pensaron en el desequilibrio económico y mental de los aportantes?, por favor señores.
El Perú necesita una reforma total en la Administración del Fondo de Pensiones, una salida podría ser Nacionalizando las AFP del mercado peruano, como hizo Argentina y Bolivia, por el bien de los hermanos pensionista, dejemos de elegir “Lobis” de estas AFP.
Señor Presidente y Padres de la Patria, pensemos en darles una grata calidad de vida de los últimos que les queda a los futuros pensionistas; quienes trabajan incansablemente para tener una pensión que les ayude a subsistir dignamente en el momento que les toque jubilarse y, dejar que sigan enriqueciéndose estas AFPs capitalizando dinero agendo para sus propios beneficios.
*Artículos firmados son responsabilidad del autor – Tu Diario