
A través de un pronunciamiento público Unicef Perú exige justicia y medidas inmediatas del Estado tras la muerte de una niña madre en el caserío de Piruro, poblado de Yuragmarca, distrito de Panao en la provincia de Pachitea, ocurrido la noche del 1 de agosto.
‘Este es una muerte prevenible que nunca debió ocurrir, como no debería ocurrir la violencia sexual hacia niñas, niños y adolescentes. El Estado peruano y sus instituciones deben garantizar la protección integral de la niñez, y en el caso particular de niñas embarazadas, el acceso a información, servicios de salud, atención psicosocial y apoyo jurídico para ejercer los derechos que les concede la Convención de los derechos del Niño y la normatividad peruana’, dice parte del pronunciamiento.
Asimismo, indica que urge fortalecer las acciones de prevención, velar por las niñas y adolescentes víctimas, por los niños nacidos de embarazos producto de violencia sexual.
Como informamos en su oportunidad, la menor de iniciales NAP de 13 años, murió a causa de un shock hipovolémico provocado por la hemorragia que le dio tras alumbrar a un bebé en su casa y sin asistencia médica. El caso está en investigación.