Cercenado y calcinado fue encontrado los restos del empresario moqueguano César Augusto Ortiz Alponte (42) por cuya liberación exigían tres millones de soles. El hallazgo ocurrió a once días del plagio ocurrido en la zona de Afilador, distrito de Rupa Rupa en la provincia de Leoncio Prado.
Para llegar al caserío de Santa Martha, distrito de Huipoca, provincia de Padre Abad en la región Ucayali, policías del Departamento de Investigación Criminal de Leoncio Prado liderados por el comandante PNP Fernando Terrones Cruz fueron guiados por el detenido Juan Roger Deza Espinoza, primo del cabecilla de la banda criminal denominada “Los Hoteleros de la Muerte”, Carlos Daniel Espinoza Domínguez.
También apoyaron en la búsqueda del terreno, los ronderos y personal de la comisaría de Aguaytía. Al llegar al lugar, los agentes encontraron una casucha construida a base de plásticos y palos, donde ubicaron prendas de vestir, medicamentos, utensilios de cocina, herramientas como machete, hacha, martillo, pala y pico.
Unos metros más allá, los investigadores ubicaron tierra removida y quemada por lo que de inmediato procedieron a escavar encontrando tres huecos con restos humanos quemados que, por las características físicas, la policía está segura que pertenecen a César Ortiz. La diligencia de levantamiento de cadáver fue dirigida por el fiscal, Miguel Barrionuevo Torres de la Fiscalía Penal Corporativa de Padre Abad, quien dispuso el traslado de los restos a la morgue de Castillo Grande, donde hoy serán sometidos a necropsia por un equipo forense.
MENSAJE. Los criminales enviaron un mensaje a la familia, indicando que no debieron creer en la Policía con el rescate, porque según ellos era falso. “Nosotros mientras estén los policías e interfieran sucederá así, esto es la muestra para todo aquel que crea y confía en la policía y sus engaños en liberar o rescatar algún rehén. Preferimos matarlo y no ganar nada, así que esperamos que comprendan”, dice parte del mensaje que los criminales enviaron a través del aplicativo WhatsApp acompañados de videos, donde registraron el asesinato de Ortiz Alponte.
“Estaba vivo cuando empezaron a cercenar su cuerpo, la policía tiene que identificar a todas las personas que hicieron ese macabro acto”, dijo una fuente de Tu diario.
ALGO +
Fuentes policiales informaron que, por las amenazas, la familia está consternada por lo ocurrido y sólo un pariente habría llegado a Tingo María para recoger los restos del empresario natural de Ilo, Moquegua.
