Sala de Apelaciones confirma sentencia de seis años de cárcel para suboficial de la Policía

Los magistrados de la Sala Penal de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Huánuco, ordenaron la ubicación y captura del sentenciado Pedro Arturo Flores Laban, sentenciado por el Cuarto Juzgado Unipersonal Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios a seis años de cárcel tras ser hallado culpable del delito de cohecho pasivo propio en agravio del Ministerio del Interior.

Los jueces superiores declararon infundado el recurso de apelación presentado por la defensa técnica del suboficial de la Policía y confirmaron la sentencia número 003-2020 contenida en la resolución n° 9 emitida el 14 de enero del 2020. Además de la condena a seis años de cárcel, el agente que hasta fines de febrero de este año trabajaba en la comisaría de Cayumba, perteneciente a la División Policial de Leoncio Prado, fue inhabilitado por el período de tres años y al pago de seis mil soles por concepto de reparación civil.

CASO. El 17 de junio del 2015 a las 12:40 del día Javier Namuche Rodríguez, quien conducía el trimóvil de placa W1-8691 por la cuadra tres del jirón Callao, en Tingo María, fue intervenido por la suboficial de la Unidad Tránsito, Judith Gonzales Rivera, porque supuestamente su unidad estaba mal intencionada y pidió que presente sus documentos, pero el referido conductor no tenía a la mano su licencia de conducir y tarjeta de propiedad.

Mediante boleta de internamiento n° 009792 el bajaj fue llevado al depósito municipal, donde la referida agente le impuso la papeleta por infracción al Reglamento Nacional de Tránsito y el acta de intervención fue entregada a la comandante de guardia de la referida unidad. Horas después, el mototaxista acudió a la Unidad de Tránsito, donde fue atendido por el suboficial Flores Laban, quien le refirió que además de los documentos que tenía debía presentar una copia de la denuncia policial por pérdida de tarjeta de propiedad y licencia de conducir.

Al día siguiente, Javier Namuche acudió a la sede policial llevando los documentos que el agente solicitó y fue atendido nuevamente por el suboficial Pedro Arturo Flores, quien explicó que el costo por no tener licencia de conducir era de 1900 soles, pero ante ello el mototaxista le refirió que era demasiado y no contaba con dicha cantidad por lo que, el agente propone imponer una papeleta por infracción más leve a cambio de 200 soles, pero el conductor le dice que solo tenía 100 soles y en ese instante quiso sacar, pero Flores le dice aquí no.

Le citó en 15 minutos en la cuadra 10 de la Alameda Perú sin imaginar que en dicha cuadra vivía el mototaxista que estaba dispuesto a pagar los 100 soles, pero al contar a su hermano Jorge Fernando Namuche de lo que estaba haciendo, le propone grabar la acción ilícita del policía, y coloca en el bolsillo de su camisa una micro cámara tipo lapicero y acude al encuentro con Flores Labán, quien estaba a bordo de la motocicleta policial de placa PL-12620 acompañado de la suboficial Francoise Verenisse Shapiama Díaz.

Instantes que pretendía entregar el dinero el suboficial le dice aquí no por lo que ingresan al local comercial de ventas de motocicletas denominado «TORIMSA SR», donde entrega los 100 soles, luego salen a la parte posterior y cuando hablaban de la papeleta, Flores Laban descubre que estaba siendo filmado, por lo que decide arrebatar la micro cámara que estaba en el bolsillo de su camisa. Jorge Fernando, quien desde su casa estaba filmando el encuentro de su hermano con el policía y al ver que le arrebata la cámara decide increparlo.

Los suboficiales Flores y Shapiama intentan salir a bordo de la moto, pero ante la aglomeración de las personas deciden huir corriendo dejando el vehículo para luego refugiarse en la comisaría, donde pidió ayuda a sus colegas indicando que los hermanos Namuche Rodríguez intentaron robar la moto. Llegaron al lugar cerca de 15 policías al mando de la entonces capitán PNP Lady Milena Morales Bernal, quien dispuso la detención de los hermanos, sin darles la oportunidad de explicar, el porqué, la moto fue abandonada en el lugar.

Javier, su mamá de 72 años y un trabajador fueron tratados como delincuentes y trasladados a la comisaría, donde los retuvieron más de cinco horas y pese que eran agraviados de un caso de abuso policial, el fiscal Edwin García Palomino, no hizo nada, por lo que los hermanos decidieron denunciar el caso en la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios Huánuco.

ALGO MÁS

Las imágenes del encuentro entre el denunciante y el policía, fueron valorados por los magistrados como prueba del ilícito penal.

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