Parientes de madre, hija y nieto degollados en las alturas de Sirabamba piden justicia

A ocho días del triple homicidio ocurrido en el anexo de Puro Puro, poblado de Sirabamba, distrito de Santa María del Valle, una de las hijas cuyo nombre guardaremos en reserva por seguridad, pidió al fiscal James Lurita Moreno de la Segunda Fiscalía Penal Corporativa de Huánuco y al equipo de homicidios del Departamento de Investigación Criminal esclarecer la muerte de su mamá Herlinda Ángel Daza (52), su hermana Noemí Morales Ángel (22) y su sobrinito Yeferson Cruz Morales (6).

En comunicación telefónica con Tu diario, Morales Ángel, dijo que no era justo que pese al tiempo transcurrido el fiscal a cargo del caso no haya solicitado la detención preliminar de los sospechosos que vienen a ser los hermanos de su papá. “El día del homicidio mi tía Aquilina Morales Acosta vio a dos jóvenes que llegaron por el lugar donde estaba mi mamá y entre ellos estaba un tal ‘Pacho’ que es hijo de Vilma Morales Santillán, la policía ya tiene sus datos y debe llamar a declarar para saber que hacía en ese lugar, si él vive por Las Moras”, declaró.

Asimismo, aseguró que detrás del triple homicidio estarían sus tíos Grover, Isidro, Yolin y Vilma Morales Santillán respectivamente, quienes desde el año pasado habrían jurado acabar con su familia por problemas de tierras. “Hay testigos a quienes la policía debe llamarlos a declarar, porque mi tío Grover en una reunión habría dicho, aunque le cueste 80 mil soles contrataría sicarios para acabar con mis padres y por eso estamos seguros que fueron ellos los autores intelectuales”, manifestó.

Noemí, quien fue degollada junto a su hijo y mamá, era la tercera de siete hermanos que hoy piden justicia para sus seres queridos, cuyos cuerpos fueron sepultados en el cementerio de Llacón de donde era natural la finada Herlinda.

HECHOS. La tarde del 1 de febrero del 2022 Santiago Morales Santillán y su hijo Rusell Wilson Morales Ángel, quienes llegaron de trabajar encontraron la aterradora escena. Su esposa estaba muerta en una zanja con una herida en el cuello, al igual que su hija Noemí y su nieto. La necropsia reveló que Herlinda, Noemí y el pequeño Yeferson fueron degollados por sus verdugos, quienes utilizaron un machete el cual fue encontrado a unos 400 metros de la escena.

“Por favor pido que el asesinato de mi madre, hermana y mi sobrinito no quede impune como muchos casos. Mi familia está destrozada y con miedo, porque mis tíos que tienen conocidos en la fiscalía, juzgado y policía han dicho que nos va matar a todos”, dijo.

Algo más

Aquilina Morales, quien vio a dos personas caminando cerca al lugar del crimen, dijo que el perro que acompañaba a Herlinda no ladró, por el contrario, les movió la cola.

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