Tras acogerse al proceso de conclusión anticipada y así evitar la condena a cadena perpetua, Alcoque Máximo Isidro Ricra (33) fue condenado a 35 años de cárcel tras ser hallado culpable del delito de robo agravado con subsecuente muerte en agravio de la escolar Luz María de 14 años. Asimismo, los magistrados del Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de Huánuco, ordenaron el pago de 10 mil soles por concepto de reparación civil a favor de los herederos legales de la menor.
HECHOS. El 9 de abril del 2022 cuando la menor manipulaba su celular mientras pastaba sus ovejas en la zona conocida como Pagra, poblado de Pumacahua, distrito de Puños, provincia de Huamalíes, fue observada por Isidro Ricra, quien estaba acompañado de los menores de iniciales F. M. P. Q. (16) y R. C. S. B. (17). Luego de repartirse roles decidieron atacar a la alumna del tercer grado de educación secundaria de la Institución Educativa Maglorio Rafael Padilla Caqui, donde luego de reducirla, la violaron y para evitar ser denunciado, porque la agraviada los habría reconocido, decidieron degollarla.
Arrastraron su cuerpo unos metros y la arrojaron a un chacra de cebada, donde quedó en posición decúbito dorsal. Luego los tres criminales llegaron caminando hasta el pueblo de Puños, donde en una tienda vendieron a 250 soles el equipo que robaron a la menor, pero como el dueño no tenía dicha cantidad, sólo les entregó como adelanto 100 soles.
Al día siguiente del hecho de sangre, Isidro Ricra, fue detenido por la misma población que estaba consternada por lo ocurrido con la escolar y estuvo a punto de hacer justicia con sus propias manos, pero personal de la comisaría de Llata llegó al poblado de Pumacahua para rescatar al monstruo que estaba inconsciente producto de la golpiza que recibió y fue trasladado al Hospital Regional Hermilio Valdizán.
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La sentencia contra el llamado “Monstruo de Puños” fue dictada a casi cinco meses del hecho de sangre que conmocionó a la población
