Hasta anoche, de los siete policías detenidos por un presunto caso de corrupción en la comisaría de Acomayo, el juez Samuel Cabanillas Catalán del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de Huánuco, dispuso prisión preventiva para tres agentes, dos salieron libres y faltaba resolver para dos.
El último agente en salir en libertad bajo reglas de conducta es Hans Dewnis Canto Veramendi para quien el magistrado dispuso el pago de una caución de 20 mil soles en un plazo de un mes. También prohibió acudir al establecimiento penitenciario de Potracancha para visitar a sus co-imputados.
En la resolución dictada en audiencia pública, el juez aplicó el principio de interés superior del niño, esto debido que Canto al momento de hacer uso de su auto defensa dijo ser padre y madre para su hijo, y entre los documentos presentados por la defensa valoró la demanda por pensión alimenticia que planteó a su ex pareja.
En consecuencia, al no existir de manera copulativa los tres presupuestos (fundados y graves elementos de convicción, prognosis de pena y no haya peligro procesal) para dictar prisión preventiva, dispuso comparecencia con restricciones. La misma suerte no corrió el suboficial José Carlos Morales Vargas para quien, el juez sí declaró fundado el requerimiento y dispuso su traslado al penal que ayer mismo fue ejecutado.
Con Morales, Juan Gutiérrez Córdova y Jeysson Calampa Chuquimbalqui son tres los policías que afrontarán la investigación por la presunta comisión del delito de cohecho pasivo propio en el ejercicio de función policial en prisión. A parte de Canto, la suboficial Nohely Franchesca Silvestr Rosales afrontarán la investigación en libertad. Anoche iba resolver el caso de Edwin Jaime Bueno Pérez, pero al cierre del informe no había resultado.
Entre tanto, para hoy está programada la audiencia para el último detenido, Luis Melchor Gonzáles Ponce a quien la fiscalía sindica de ser autor del delito contra la administración de justicia, esto por presuntamente haber aceptado una ventaja económica de 3 mil soles de parte de los investigados Gustavo Cecilio Lastra y Emerson Salvador Lastra para no ser detenidos por un caso de violación sexual en agravio de dos menores de 12 y 13 años.
ALGO +
La irregular intervención a dos sospechosos ocurrió el 5 de setiembre, hecho que en un primer momento negaron los policías y ante las evidencias algunos terminaron por aceptar, incluso algunos estarían analizando someterse a la confesión sincera.
