En tiempo récord, policías del Departamento de Investigación Criminal de Leoncio Prado, dirigidos por el mayor Fernando Terrones Cruz, lograron capturar a tres personas que horas antes habrían participado en el secuestro y posterior homicidio de Amer Elías Tupiño García (65), cuyo cuerpo fue hallado en una trocha carrozable de Naranjillo, distrito de Luyando en Leoncio Prado.
Los sospechosos de la privación de la libertad y posterior asesinato del sexagenario son: Favio Jerome Málaga Camasca (25) sobrino de la víctima, David de la Cruz Álvarez (26) y el mototaxista Jhonatan Carrasco Espinoza (26). El primero en ser capturado fue Jhonatan, debido que cerca de la escena del crimen, los policías que participaron en la diligencia de levantamiento encontraron un papel tamaño oficio doblado que decía “Plan de pagos de moneda nacional” de la finanza “Señor de Qoyllurit”, el cual estaba a nombre de Jhonatan Carrasco.
Los investigadores al indagar con los moradores si habían visto algún vehículo sospechoso, descubrieron que horas antes vieron ingresar a un trimóvil rojo con el logotipo de la empresa de transportes “Floqui”. Con dicha información, los agentes lograron contactarse con el encargado de Radio Taxi Floqui, David Gamarra Runco, quien al ser consultado sobre las características del bajaj, dijo que la empresa sólo contaba con dos vehículos rojos de placa 4889-CW conducido por Jhonatan Carrasco Espinoza y el 3917-DW cuyo conductor registrado es Jhordy Carrasco Espinoza.
El nombre del primer conductor coincidía con los datos hallados en la escena del crimen, por lo que los policías pidieron al encargado de la empresa llamar a Jhonatan para acercarse al complejo policial para esclarecer un caso en la que estaría implicado. Es así que a las 5:30 de la tarde del 7 de diciembre, Carrasco Espinoza, llegó a la sede policial, pero estaba sin el vehículo que conducía y al ser preguntado, dijo que lo había dejado en el lavadero “El Pulpo”, ubicado en el sector 9 de octubre, Las Palmeras Mz. P, Lte. 13, en Supte San Jorge. De inmediato los investigadores llegaron al citado lugar y encontraron el trimóvil rojo lavado y modificado. Uno de los trabajadores del lavadero reconoció a Jhonatan como la persona que dejó el trimóvil para lavar y sacar las puertas laterales.
Al verse descubierto, el mototaxista no tuvo otra opción que decir que sólo había participado haciendo una carrera al sector Naranjillo y que las personas que lo habían contratado estaban hospedadas en las habitaciones 105 y 106 del hotel Madera Verde. Ante dicha información, los policías llegaron al kilómetro 1 de la carreta Tingo María Huánuco y al ingresar al referido hotel, en el área de piscina fueron capturados Favio Malaga Camasca y José de la Cruz Álvarez, quienes estaban bebiendo cerveza.
En el registro de los búngalos, donde ambas personas estaban hospedadas, los investigadores encontraron dos equipajes, uno a nombre de Joel Enrique Ibarra Caballero y de un tal David. También encontraron un sobre manila conteniendo documentos a nombre de Hugo Martín Pacchioni Silva.
DILIGENCIAS. Mientras un grupo de policías junto al fiscal Inti Montes Sotelo de la Segunda Fiscalía Penal Corporativa de Leoncio Prado realizaba la diligencia de levantamiento del cadáver de Amer Tupiño García que luego fue trasladado a la morgue, otros agentes realizaban las diligencias que terminaron con la captura del mototaxista, sobrino del agraviado y su amigo, quienes hasta anoche continuaban detenidos en la sede policial.
Las diligencias para el esclarecimiento del hecho criminal continúan, porque los investigadores no descartan la participación de otras dos personas en el homicidio del sexagenario, quien desde hace varios años tenía un litigio por tierras con su hermana.
Según la policía, Amer Tupiño, quien vivía en el jirón Aucayacu, en Tingo María, habría sido interceptado y subido a la fuerza al trimóvil rojo para luego ser trasladado a Naranjillo, espaldas del recreo “La Ramadita”, donde fue asesinado de un disparo a la sien.
Jhonatan Carrasco Espinoza, dijo a los policías que mientras trasladaban con vida al sexagenario, uno de sus pasajeros (Favio Málaga) reclamaba por unas tierras.