Sólo y olvidado, murió un indigente de unos 60 a 65 años que todas las noches dormía a un costado del Servicentro Grifo El Trébol, ubicado en la intersección del Malecón Alomía Robles y jirón 28 de julio. El desafortunado hombre que vestía casaca roja, buzo plomo y zapatos negros no pudo llegar hasta los cartones que utilizaba como colchón para descansar en la vereda, ante la mirada indiferente de los transeúntes.
Alertados por los vecinos, llegaron personal de serenazgo de Huánuco, cuyos agentes al corroborar que no tenía signos de vida, comunicaron el caso a la Cuarta Fiscalía Penal Corporativa de Huánuco para la diligencia de levantamiento del cadáver.