Policías de la comisaría de Panao dirigidos por el fiscal Dugver Ludeña Zanabria de la Segunda Fiscalía Penal Corporativa de Pachitea ayer, realizaron la diligencia de levantamiento de los restos de un bebé de aproximadamente un mes de nacido, cuyo cuerpecito era devorado por canes.
El macabro caso que causó sorpresa en los moradores ocurrió en el caserío de Cucho, jurisdicción del distrito de Umari, provincia de Pachitea, hasta donde llegaron las autoridades alertadas por la propietaria del inmueble que aseguró que su perro llegó a su casa trasladando partes del cuerpo de una persona (bebé). Al revisar la caja, donde fueron puestos de manera provisional, la policía constató la cabeza, los brazos y partes de la caja torácica.
Por el avanzado estado de descomposición y por las partes faltantes, la policía no pudo establecer si los restos pertenecen a un varón o mujer, por lo que, por disposición del representante del Ministerio Público, la caja conteniendo las partes fueron trasladadas a Huánuco para ser internados en la morgue.
