A más de un año del execrable hecho, el Juzgado Penal Colegiado Supraprovincial de Leoncio Prado condenó a 35 años de cárcel a Luis Israel Montaña Trujillo (19), quien fue hallado culpable de los delitos de secuestro, violación sexual y feminicidio en agravio de una niña de 5 años. Asimismo, los jueces ordenaron el pago de una reparación civil de 30 mil soles a favor de los herederos de la pequeña.
El caso que terminó en sentencia y en su momento causó conmoción en la población data del 30 de octubre del 2023 cuando la agraviada de 5 años junto a su hermanita de 7 años asistieron al centro educativo del caserío de UTC-Bambú, ubicado a la margen izquierda del río Huallaga, en el distrito de José Crespo y Castillo, provincia de Leoncio Prado.
Tras salir de su colegio, las hermanitas y otro compañerito caminaban con dirección a su casa ubicada en el caserío Nueva Colina cuando fueron interceptados por Luis Montaña, quien conducía una moto negra de placa 58117W y ofreció llevarlos, pero la menor de 7 y de 8 años no quisieron, pero la pequeña de 5 si aceptó y subió al vehículo para ir con dirección a una casa rústica ubicada en su chacra.
Aprovechando que la vivienda estaba alejada de otras casas, el depravado violó a la niña y en un acto inhumano y salvaje, cogió un machete afilado que usaba para trabajos de campo y le dio dos machetazos a la menor en el cuello hecho que provocó la muerte tras desangrarse. Y con la finalidad de ocultar su delito, Montaña Trujillo puso el cuerpo en un costal negro para luego trasladarla a una zona boscosa, ubicado a unos cien metros del lugar de la escena.
Al ver que su hija no llegaba a casa, la mamá pidió ayuda a sus vecinos y demás moradores para buscar a la pequeña de quien sabía por medio de su hermana que había subido a una moto negra de un extraño. Los pobladores comenzaron la incansable búsqueda hasta que en una chacra de plantaciones de cacao encontraron la moto con las mismas características y al buscar a su dueño (Luis Montaña) preguntaron si habían visto a una menor, pero dijo que no.
Ante ello, la mamá acudió a la comisaría de Aucayacu para denunciar la desaparición de su pequeña y los policías salieron en búsqueda de la pequeña y cuando ingresaban por una trocha carrozable de acceso al sector Puerto Mohena, los policías vieron a lo lejos a Montaña Trujillo y procedieron a intervenirlo. Instantes que era interrogado si había visto o no a la niña, el ahora sentenciado empezó a sobarse su parte íntima por encima del short, hecho que terminó delatándolo.
Tras ser sometido a un riguroso interrogatorio, confesó lo que había hecho y guío a los policías hasta el lugar, donde había escondido el cuerpecito de la menor que en su inocencia subió a la moto de un desconocido, sin imaginar que terminaría vejada y atacada con un machete.