El líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia ha sido exiliado en España, tras lo que muchos venezolanos consideran su victoria en las elecciones pasadas del 28 de julio. Sin embargo, el actual presidente de Venezuela sigue siendo Nicolás Maduro, pese a que su reelección ha sido catalogada como un fraude por ciudadanos venezolanos y diversos líderes internacionales.
González Urrutia ya enfrentaba una orden de arresto emitida por el Ministerio Público de Venezuela, que lo acusa de varios delitos, entre ellos usurpación de funciones, falsificación de documentos públicos, instigación a la desobediencia de leyes, conspiración y sabotaje. En respuesta, González decidió abandonar el país, anunciando su salida en un comunicado a través de su cuenta en la red social X.
En su mensaje, el opositor explicó que su decisión de trasladarse a España, con el apoyo del gobierno español y la embajada de los Países Bajos, fue tomada para evitar que Venezuela se vea envuelta en un conflicto aún más doloroso. Subrayó que su partida se debió a la necesidad de preservar la paz y la unidad en su país, así como para proteger a su familia y a las familias venezolanas que viven momentos de angustia y tensión.
González, quien siempre ha defendido los valores democráticos, reiteró que su compromiso no está basado en ambiciones personales, sino en la necesidad de promover el diálogo y la reconciliación. Destacó la importancia de la democracia y la voluntad popular como únicas vías para el futuro de Venezuela.
El opositor también expresó su preocupación por las personas encarceladas que lo han apoyado, afirmando que su libertad es una prioridad irrenunciable. Finalmente, agradeció a su familia y a todos los que lo han respaldado, y reconoció el trabajo de María Corina Machado y la Plataforma Unitaria en el proceso electoral.
