El lavado de manos es hasta ahora la principal medida para evitar un posible contagio por coronavirus; sin embargo, hay muchas dudas sobre qué preferir: jabón o alcohol en gel. ¿Cuál es el más seguro y en qué situaciones emplearlo? A continuación, te explicamos sus diferencias.
Miguel Tinoco, médico de Sisol Salud, explicó que el jabón es el agente limpiador por excelencia para evitar la propagación de bacterias y virus, ya sean simples o algo más complejos como el covid-19.
¿Por qué el jabón? La principal razón es porque “la capa alrededor del virus está hecha de una membrana lipídica, es decir, de grasa, y el jabón, como todos los detergentes, disuelve la grasa, con lo cual destruye la capa protectora del virus y este muere”.
Explicó que los virus no tienen vida propia y por eso necesitan entrar en el cuerpo para mantenerse con vida y multiplicarse. Ingresan al organismo por la nariz y boca.
Ya sea en barra o en líquido, el jabón tiene las mismas propiedades; sin embargo, el experto sugirió preferir la presentación líquida debido a que no permite el contacto con otras manos que podrían estar contaminadas, lo que no ocurre con el jabón en barra, a menos que sea de uso personal.
El correcto lavado de manos debe durar 20 segundos como mínimo, incluir el dorso y palma de las ambas manos, enjabonar las uñas, las que deben mantenerse de preferencia cortas. El lavado de manos previene el contagio de una serie de infecciones, enfermedades diarreicas, desarrollo de parásitos, entre otras complicaciones.
¿El alcohol en gel también me protege?
Con respecto al alcohol en gel, el médico señaló que es efectivo también contra los virus, pero su mayor virtud es “sanitizar” las manos hasta que estas puedan lavarse como corresponde.
“Este producto puede destruir al virus y bacterias, pero estas se quedan allí. El beneficio del jabón es que barre con todo y libera las manos de patógenos. Se recomienda el uso del alcohol en gel por tres o cuatro ocasiones, pero luego es necesario lavarse las manos con jabón. No se debe olvidar que el uso continuo de alcohol puede irritar la piel”.
Coronavirus
Si después de lavarse las manos, no hubiera toalla o papel para secarse, pidió evitar tocarse el cabello o ropa porque podrían estar contaminados con bacterias o virus.
“Lo ideal es que, con el mismo papel toalla con el que nos secamos las manos, cerremos el caño o grifo de agua para no entrar en contacto nuevamente con agentes infecciosos. Lo mismo debe pasar con la llave o manubrio de las puertas de baños, sobre todo si son públicos”.
Precisó que los virus pueden mantenerse inertes sobre diversas superficies hasta por 24 horas, pero pasado ese tiempo ya están muertos, razón para no temer recibir paquetes procedentes de China o de otros lugares con alta afluencia de este mal.
¿Mascarilla o tapaboca?
El especialista reiteró, como lo señaló la ministra de Salud, que las mascarillas deben ser usadas únicamente por el personal de salud en contacto con pacientes ya contagiados o enfermos.
“Las mascarillas N95 son solo para personal de salud que está en tratamiento con pacientes. Estas mascarillas tienen una validez de hasta 15 días y se pueden almacenar en una bolsa de papel, nunca de plástico”.
Con respecto al tapaboca, que son mascarillas de tipo simple, señaló que deben desecharse diariamente y ser empleadas por quienes están resfriados, con gripe o problemas respiratorios. Su uso es para prevenir contagiar a otras personas.
Distancia de dos metros
Además de evitar saludos afectuosos, estrecharse la mano innecesariamente y lavarse las manos de manera frecuente, el doctor Miguel Tinoco recomendó mantener una distancia mínima de dos metros sobre todo de personas agripadas o resfriadas.
“Se recomienda que las personas enfermas se mantengan aisladas y siempre con la mascarilla puesta. Deben tener útiles de aseo personal, no compartidos con nadie”.
Mantener la calma
El médico de Sisol Salud pidió mantener la calma y no olvidar que si bien presentan síntomas similares, cualquier resfrío o gripe no es un caso de coronavirus.
“Los síntomas de un coronavirus incluyen fiebre, moco, tos, pero el aspecto más importante es que la persona haya viajado al extranjero o estado en contacto con personas que vienen de otros países. Eso marca la diferencia”, subrayó.
Si se cumplen todos estos principios, recomendó proceder inmediatamente a la cuarentena por 14 días hasta que pase el peligro de contagiar a más personas, sobre todo a ancianos, personas con el sistema inmunitario débil o con enfermedades crónicas.
Fuente: Andina