HUÁNUCO DEL AYER
Las casas haciendas que se encuentran alrededor de la Ciudad de los Caballeros de León de Huánuco, dentro de los hermosos valles del Huallaga e Higueras, dominio de los Chupachos, es la expresión heredera de la época colonial, muchas de estas se resisten en sobrevivir tercamente a pesar que transcurrieron más de 500 años de su construcción.
Estas fincas en sus inicios fueron reductos religiosos, que se encontraban en esta parte del territorio peruano con la finalidad de emprender la conquista espiritual de los pillkos (indios) y de los nativos de la selva, su edificación respondía a la necesidad de ser conventos.
En nuestro departamento estaban localizados diversas haciendas, pero podemos citar: Vichaycoto, Cayhuayna, Colpa, Mitopampa, San Roque, Pucuchinche, Shismay, Cashapata, Huachoj, Pacán, Canchán, Marabamba, Rondos y Zevallos.
También había haciendas que estaban más alejadas, entre ellas: Sacsahuanca, Derrepente y Pati en Cárpish; Vilcabamba en Chinchao; más allá, Mayro, San Miguel, Pipish, Tingo, Tambo Durand, Atabillos, Gloria, Buenaventura, Paraíso, Tucto, León Pampa, La Unión, Lauricocha, Mosca, de Cristóbal Milósevic, entre otras.
HACENDADOS
Muchas familias de la aristocracia de hacendados se asentaron a inmediaciones de la hidalga ciudad de Huánuco, una de ella fue Jorge Durand Fernández Maldonado, dueño de la hacienda Colpa; Gregorio Víctor Durand Fernández Maldonado, propietario de las haciendas Huancachupa y Pitumama; Guillermo Durand Fernández Maldonado dueño de la hacienda Quicacán, luego transferido a la familia Thorne, entre otras familias.
FIESTA EN LA HACIENDA
Según Esteban Pavletich: “Como el departamento de Huánuco era eminentemente agrícola, habían numerosas haciendas donde vivían casi permanentemente los hacendados con sus familias, pues dentro de ellas tenían toda clase de comodidades como capilla, escuela, cancha de fútbol, básquet, piscina, juegos de salón, servidumbre, además de una saludable vida de chacra. Estos hacendados anualmente celebraban a su Santo Patrón, cuya festividad duraba no menos de una semana”.
Prosigue: “En ella participaban los trabajadores y los numerosos invitados que llegaban de la ciudad. Para la fiesta mataban dos o tres reses, gallinas, cerdos, cuyes. Se utilizaban quinientos kilos de papas, numerosos condimentos y con ellos se preparaban diversos potajes huanuqueños tales como: pachamanca, locro de gallina, sopa de cushuro, sancochado, picante de cuy y de chochos, ensalada de palta y de frijolitos verdes. También dulce de calabaza, de trigo, chancaquitas, alfeñiques, zanguito que servían con abundante chicha de jora y de maíz (…) Asistí acompañando a mis padres y hermanos a muchas de esas fiestas, en especial a la que ofrecía el hacendado Javier Rolando en la hacienda Shishmay, ubicada en las alturas de Huánuco, cerca de la hermosa laguna Mancapozo”
HACIENDA ANDABAMBA
Localizado en la margen izquierda del rio Huallaga, aproximadamente a seis kilómetros de Huánuco, donde habitaron los misioneros evangelizadores de los franciscanos, allá por los años 1570; posteriormente, fue traspasado al dominio de los aristocráticos hacendados, en especial de la familia Durand.
El convento de Andabamba contaba con parcelas agrícolas, producía deliciosas frutas; era la dispensa de sobrevivencia de los frailes franciscanos que se encontraban en el Convento de Huánuco, luego convertido en la casa hacienda de Andabamba, cuyos propietarios eran la familia Durand; procesaban aguardiente de caña de azúcar, alcohol, velas, jabones hasta cocaína para uso medicinal; la misma, que contaban con la autorización respectiva.
Según José Varallanos, en su libro Historia de Huánuco, en esta hacienda fue detenido el líder de la sublevación de Huánuco de 1812, el curaca José Contreras, cuando comandaba el ejército de los Chupachos y Panataguas, para enfrentarse en Ambo a la fuerza española, lamentablemente fue apresado, asesinado y arrojado su cadáver al río Huallaga.
Además, da cuenta, que el libertador Simón Bolívar en su breve paso por la tierra huanuqueña quien llegó para proclamar la independencia, se hospedo en esta casa hacienda, haciendo uso de un escritorio que se encuentra hasta el día de hoy, donde redacto proclamas a favor de la reivindicación de los indios.
La danza de costumbrista de los negritos de Huánuco, hoy proclamado como patrimonio de la Nación; nació aquí, dentro de estas instalaciones de la hacienda, en sus inicios practicado por los negros que trabajan como esclavos, traídos desde África, quienes en memoria de su madre cultura realizaban esta danza, para luego a cambio de comida lo realizaron en festividades de la Navidad.
En esta finca habitó Augusto Durand, abogado, político líder fundador del partido liberal en la época republicana.
HACIENDA VICHAYCOTO
Parecía una sábana verde, tendido a orillas del caudaloso rio Huallaga, totalmente sembrado de caña de azúcar para producir el famoso aguardiente. En sus inicios fue un convento de los frailes dominicos, que se encontraban dirigiendo la iglesia de Santo Domingo Cristo Rey de Huánuco.
Era una parcela de producción agrícola para los religiosos, para auto subsistir, fue construido por los años 1580 aproximadamente. Posteriormente en 1800 fue transferido a don Leónidas Ingúnza, luego a Negociación Durand, de propiedad de don Augusto Durand.
HACIENDA SHISMAY
Según el obispo de Huánuco Rubén Berroa, en su libro “Monografía eclesiástica de la diócesis de Huánuco y Junín 193”, esta hacienda fue edificada por los inmigrantes tirolés-alemanes cuando se trasladan a pie rumbo a la conquista de Pozuzo, allá por los años 1858. Uno de los propietarios de este predio fue Don Mariano Ignacio Prado, presidente del Perú, luego estuvo bajo el dominio de la familia Debarbiery; posteriormente fue adquirido por la familia Ingúnza.
En 1924 fue transferido a Javier Rolando Tello, quien lo transformó en una importante hacienda ganadera y siembra de papa, en 1979 es afectado por la Reforma Agraria. La casa hacienda permaneció en dominio de los propietarios, pero en el 2004 la familia donó este recinto a la comunidad, luego que fue restaurado, hoy convertido en un centro turístico que administra el pueblo de Shismay.