La caída de una camioneta a un abismo de más de cien metros dejó como saldo un muerto y dos menores heridos. El accidente de tránsito que enluta a una nueva familia huanuqueña ocurrió ayer en la carretera que une el poblado de Quechualoma con el caserío de Vilcabamba, altura del lugar conocido como Shicshipunta, jurisdicción del distrito de Churubamba.
Según diligencias preliminares, Egler Mori Ambrosio (37) conducía la camioneta roja oscuro mica, marca Toyota, modelo Hilux de placa AEL-723 cargado de abono, pero al llegar al sector Shicshipunta, perdió el control del volante cayendo al vacío y dando varias vueltas de campana hasta terminar en el fondo completamente siniestrado.
Felipe Candelario Basilio (46) al igual que sus hijos Héctor (10) y Noe Steven (12), y el conductor fueron auxiliados por los moradores y algunos transportistas, pero las graves lesiones provocadas por el despiste y volcadura murió camino al centro de salud de Quechualoma a donde eran trasladados de emergencia.
Los menores al igual que Egler Mori fueron evacuados al Hospital Regional Hermilio Valdizán, donde hasta anoche estaban en observación. Entre tanto, alertados del accidente policías de la comisaría de Rancho llegaron al lugar al igual que el fiscal de turno para realizar la diligencia del levantamiento del cadáver.
Luego de ser revisado por el médico legista, el cuerpo sin vida de Felipe Candelario fue entregado a su hijo Lincol Candelario Guillen (20) para ser trasladado y velado en su casa. Entre tanto, el representante del Ministerio Público dispuso a la policía la detención de Egler Mori por estar inmerso en la presunta comisión del delito contra la vida, el cuerpo y la salud en la modalidad de homicidio culposo en agravio de Candelario Basilio.
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Peritos de la Unidad de Prevención e Investigación de Accidente de Tránsito (Upiat) Huánuco llegaron a la escena para realizar la diligencia de inspección técnico policial.







