
En un acto de desesperación y evitar que sus menores hijos mueran de hambre, una pareja tomó la decisión de regalar a sus pequeños de 9, 7, 4 y 2 años, pero la oportuna intervención de sus vecinos que reportaron el caso al alcalde del centro poblado de San Miguel de Rancay, distrito de Conchamarca, provincia de Ambo, departamento de Huánuco, hizo que la idea de entregar a sus hijos cambiara para los esposos Francisco Herrera Santiago y Margarita Jara Aira.
“Por necesidad tenían intenciones de regalar o entregar sus hijos a los vecinos, pero con la ayuda que está recibiendo ya no”, dijo en comunicación telefónica con Tu diario el alcalde Nelmo Martel Fretel. Informó que a través de los moradores conoció el caso de Francisco y Margarita, quienes antes de la pandemia vivían en Ambo, pero al quedarse sin trabajo decidieron regresar al anexo de Carhuancho.
Asimismo, indicó que por los años que no vivieron, la casa de material rústica con techo de paja sufrió daños y tienen que cubrir con plástico o ule como ellos lo llaman. Adaptaron en un pequeño ambiente para su cocina y dormitorio, en un solo colchón y sobre el piso, dormían las seis personas (dos adultos y cuatro menores) y a veces no tenían para comer.
Ante tal realidad, los vecinos que invitaban desayuno, almuerzo y cena comunicaron a la autoridad sobre la extrema pobreza en la que vive dicha familia. “Constatamos que no tenían para comer, por lo que llevamos un poco de víveres que teníamos aquí en la municipalidad, pero consideramos que era insuficiente por lo que llamamos al alcalde de Conchamarca para que apoye y eso ocurrió hoy (ayer), donde un equipo junto al representante de la policía llegó a Carhuancho, llevando ayuda”, declaró el burgomaestre.
Dos colchones, frazadas, dos catres, víveres y utensilios de cocina fueron entregados a la pareja de esposos, cuyos hijos temerosos y asustados miraban a la cámara. La ayuda que ayer, recibió la pareja es insuficiente, porque su casa que está a punto de derrumbarse necesita ser techada, por lo que hacemos un llamado a las personas de buen corazón ayudar con un granito de arena y así evitar que los niños puedan ser entregados a otras personas.
Asimismo, hacemos un llamado a la Fiscalía de Familia hacer un seguimiento al caso que no es muy común en el departamento.
Algo más
Las niñas de 9 y 7 años no estudian y desconocen de las clases virtuales. Cualquier ayuda pueden llamar al celular número 940094143 que pertenece al alcalde del poblado de Rancay.