Las vías nacionales, departamentales y caminos vecinales de la provincia de Huamalíes se encuentran en un estado crítico, con varios tramos completamente intransitables debido a las fuertes lluvias, según dio a conocer Ricardo Prado García, consejero delegado y representante regional de la provincia. La situación afecta gravemente a la población y a las actividades económicas de la zona.
Prado García detalló que se ha observado el debilitamiento de plataformas y taludes, lo que ha provocado el aislamiento de numerosos pueblos, principalmente en las zonas del Alto Marañón, tanto en la margen izquierda como en la derecha, así como en el valle de Monzón. Los ciudadanos, principales afectados por esta situación, enfrentan dificultades diarias para acceder a servicios y mercados.
Uno de los casos más preocupantes es el acceso a Llata, capital provincial, en el tramo Tingo Chico – Culquish – Llata, que forma parte de la carretera nacional hacia Antamina. Este trayecto es constantemente interrumpido por deslizamientos de tierra que bloquean la vía. Aunque Provías Nacional y la Municipalidad Provincial de Huamalíes intervienen con maquinaria para restablecer el tránsito, los deslizamientos recurrentes dificultan una solución duradera.
En la margen izquierda del río Marañón, la carretera Llata – Puños – Miraflores – Punchao – Singa, de 58 kilómetros, presenta baches y deslizamientos que agravan el deterioro de la vía. A pesar de los esfuerzos de la Municipalidad Provincial para mitigar los daños, las intensas lluvias continúan afectando la transitabilidad.
Por otro lado, en la margen derecha, los problemas son aún más graves. El tramo Culquish – Chavín de Pariarca – Tantamayo – Carpa – Jircán – Arancay ha sufrido colapsos de puentes y tramos interrumpidos, dejando incomunicadas a varias localidades durante más de 15 días. Incluso el alcalde distrital de Arancay ha hecho un llamado urgente por el colapso de caminos vecinales que afectan a centros educativos y otras instituciones locales.
Las consecuencias de esta situación son alarmantes: escasez de productos básicos, aumento de precios y pasajes hacia Llata y Huánuco que han pasado de 50 a 70 soles. Asimismo, los agricultores de zonas como Jircán, Arancay y Tantamayo enfrentan grandes dificultades para transportar sus productos a mercados clave, como La Unión, Huánuco y Lima, afectando su economía.
Prado García anunció que las maquinarias de la Dirección Regional de Transportes y Comunicaciones estarán destinadas a las carreteras de la margen derecha en los próximos días, con el objetivo de restablecer el tránsito en las zonas más afectadas.
