Cada 14 de setiembre, Huánuco conmemora la gesta libertaria del año 1812: La rebelión de Huánuco, el segundo gran levantamiento de habitantes del virreinato del Perú en el largo proceso de la lucha por la independencia del yugo español.
Mediante Ordenanza Regional n°. 053-2016, fue decretado el 14 de setiembre de todos los años como “Día de la Dignidad Huanuqueña” en conmemoración de esta gesta libertaria de Panataguas y Huamalíes con el Grito de Pillkumasicuna de 1812 y otras manifestaciones libertarias en las diferentes provincias de Huánuco, antes de la Proclamación de la Independencia Nacional.
Ayer, la Municipalidad Provincial de Huánuco en coordinación con la Institución Educativa Marcos Duran Martel, una vez más promovieron la escenificación de este acto histórico: el grito del ‘Pillkumasicuna’, que rememora la acción heroica de campesinos y mestizos que tuvo en Juan José Crespo y Castillo a un indomable líder, quien junto a fray Marcos Duran Martel, Diego Haro, José Rodríguez, Mariano Silvestre y muchos otros patriotas enseñaron el camino para liberar al Perú del dominio español.
La conmemoración inició con una misa en la Iglesia Catedral, donde participó en representación del alcalde Antonio Jara el regidor Joel Arteaga; la directora del Marcos Duran Martel, Nancy Alonso Fernández, docentes alumnos y representantes de las instituciones educativas de San Sebastián de Quera, San Pedro de Cani, Toldobamba, Huaracalla, San Pablo de Pillao y Marcos Duran Martel.
En seguida, las autoridades, docentes y estudiantes realizaron el paseo e izamiento de la bandera fucsia reconocida mediante Ordenanza Municipal N° 023-2018 de la Municipalidad Provincial de Huánuco como la bandera empleada durante la Revolución de 1812 y primera enseña huanuqueña, otorgándole carácter formal y uso distintivo de la gesta libertaria del Pillkumasicuna.
ESCENIFICACIÓN
Estudiantes de la Institución Educativa Marcos Duran Martel se organizaron para rememorar la gesta histórica, presentándolo con gran realismo la escenificación en la Plaza de Armas de la ciudad de Huánuco. “Huk yarpella” (un solo pensamiento), “huk kallpalla” (una sola fuerza) y “huk shungolla” (un solo sentimiento) gritaron durante el enfrentamiento con los españoles.
En la remembranza, Crespo y Castillo, juntamente con el alcalde de Huamalíes José Rodríguez y el curaca Norberto Haro, fueron enjuiciados sumariamente y ajusticiados con pena de garrote en la Plaza Mayor de Huánuco.
Antes de morir Crespo y Castillo dijo a viva voz: «Muero yo, pero mil se levantarán para ahorcar a los tiranos. ¡Viva la libertad!».
